Parte XXIII

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Dedicado a LetyMendozaS 💙

Ana

Después de ese día fue tal como estipulaba nuestra apuesta, ella hacía lo que yo quería, pero no, no la manipulaba, eso sería horrible, más bien; si quería ver una película en específico ella ofrecía su casa, si quería que me acompañara a comprar algo o ir a algún sitio entonces iba conmigo.
No le pedía muchas cosas, no era una exagerada caprichosa.

Era sábado, se cumplía una semana, la apuesta terminaba esa noche. Había llegado a las cinco de la tarde, íbamos a ver películas. En casa ya no les extrañaba que me quedara una noche por semana con Emilia.
Había llevado conmigo una pizza, a ella le gustaba mucho, y por supuesto una Coca-Cola.
Cuando llegué estaba con un short hasta las rodillas y una camisa negra holgada.

-Hola

Saludó sonriendo y dándome un beso en la mejilla, desde el domingo anterior habíamos acordado no besarnos en los labios, ir poco a poco. Sin embargo moría por probarlos de nuevo.

-¿Cómo estás? ¿Qué estás haciendo?

-Nada, lavaba la ropa, en un momento estoy contigo

Subió las escaleras, fui a sentarme al sofá, dejé la pizza en la pequeña mesa que estaba a un lado de éste y llevé la Coca-Cola al refrigerador, no sabía cuánto iba a tardar en bajar, me lavé las manos y regresé a la pequeña sala, miré a mi alrededor, ahí estaban las fotos que había visto antes, fotos de ella con sus padres, fotos de cuando era pequeña, de la boda de los señores León, fotos con sus primos es algún cumpleaños, fotos con Lourdes.

-A pesar de que ya viste mis fotos cientos de veces las sigues viendo

-Cuando algo te atrae no quieres dejar de verlo

-Espero estar entre las cosas que te atraen

Se apartó de mí y fue al sofá, traía otra ropa puesta.

-¿Qué película del pasado quieres ver ésta vez?

Sí, toda la semana después de clases iba con ella (y a veces se nos unía Lou) a ver películas viejas (aunque Lou hacía todo tipo de comentarios, sobre todo cuando no le gustaban)

-Creo que quiero ver… grietas en el tiempo

Me miró alzando una ceja.

-¿No la conoces?

-No. Vamos

Dijo, tomé la pizza y fuimos a su habitación, bajé por la Coca-Cola y dos vasos, al subir ella estaba buscando en el navegador hasta dar con la dichosa película en español.

¿Alguna vez han sentido que algo sucederá en el transcurso del día? Pues así me había sentido ese sábado desde que desperté. Y lo sentía más intenso ahora que estaba sentada al lado de Emilia, talvez era mi imaginación, no sabía.

Serví el líquido y me acomodé en la cama, no hablamos nada, sólo comíamos, bebíamos y veíamos la película, en silencio total.
No fue sino hasta que los langolies se acercaban al aeropuerto que me atreví a hablar.

-Hoy acaba la apuesta

-Shh quiero saber qué hacen para salir de ahí

Bufé frustrada, quién podía sacar a Emilia de algo cuando ponía toda su atención en ello.

-Em

-Shh

-¡Emi!

-Shh

Enamorada De Mi AmigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora