¿Me enamoré de un Ghoul? [Kaneki y tú]

Cap 15 ▪️APARICIONES ▪️

~Queen - Don't Stop Me Now.

(...)

Previamente
Arima: — Bueno como gustes ¿Seguimos?.

__: — Si, vayamos.
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Arima: — ¿Así que para que quieres las armas de tu padre?.

__: — Para defensa personal, nada mas.

Arima: — Siento que me ocultas algo. ¿No será acaso para llevar a cabo la venganza de tu padre?.

__: — Para nada.

Arima: — ___, no son un juguete.

__: — Ya lo se, y ya no soy una niña, soy una adulta independiente y con criterio propio.

Arima: — Sabes bien que las armas de tu padre las estuve guardando para el momento en el que al fin te decidieras unirte a nosotros.

__: — Eso nunca pasará.

Arima: — Fuiste mi pupila, te entrené y te instruí con todos los conocimientos que sabía porque tú padre me lo pidió y también para que puedas ejercer aquella labor en un futuro, tu padre era un buen amigo mío y saber que el se ha ido por mi culpa es algo que yo no me lo perdono y te comprendo, tal vez no me llegues a perdonar nunca en tu vida pero por el únete a nosotros, ese futuro ya llego y lo sabes, si tomas tu venganza por tu cuenta el resultado sería devastador, morirías.

___: Igual moriría si me uniera.

Arima: — ___ no desperdicies tus conocimientos así como así. Piénsalo.

___: — Créame, lo he pensado lo suficiente y la respuesta sigue siendo la misma. Así que ¿y las armas?.

Arima: Respira hondo mientras apega más sus lentes con su dedo medio— Aquí están. —Dice mientras me las muestra.— Estas eran las preferidas de tu padre, déjame decirte que también son las más prácticas, pero solo te daré una, la que más usaba el en cada misión, está está hecha a partir de un kagune rinkaku, se asemejan a cuchillas pero son capaces de desgarrar completamente la piel de un Ghoul, y obviamente podrias llegar a matarlo. Ten mucho cuidado.

__: — Gracias Arima sensei, me las llevo. —Digo mientras las cojo y las examino.— y si, lo tendré.

Me despido de él y empiezo a guardar a estas dos preciosas en mi mochila.
Salgo del lugar y miro en mi reloj de muñeca que eran las 11:30.
No muy lejos de aquí quedaba una biblioteca así que ¿por qué no ir?.
Esta vez no tomo el metro y me dedico a caminar para disfrutar un poco de la ciudad.
Mientras me distraigo observando por fuera los almacenes y algunas boutiques de ropa veo en la vidriera de la tienda en la que miraba en ese momento el reflejo de un chico que se encontraba parado en lo más alto de un edificio, al girarme tan rápido como pude el mágicamente había desparecido. Es un Ghoul, no hay de otra, no le seguí prestando más atención a eso y seguí mi camino hasta llegar a la biblioteca. ¡Este era mi mundo definitivamente! Parecía como una niña en una dulcería, no sabía cuál agarrar primero, empiezo a ver algunas portadas de algunos libros interesantes, y sin pensarlo dos veces los agarro y mientras me digno para buscar algún asiento libre para leerlos, mi corazón empieza a sobresaltarse de manera inesperada al verlo a lo lejos, ¿que hacía aquí?.
Se encontraba parado, usaba unos jeans negros ajustados que hacían resaltar todo pronunciado trasero y sus tonificadas piernas y una camiseta de botones blanca ancha que lo hacían ver demasiado bien, se encontraba con el ceño fruncido y su mirada fija en la percha de libros, tal vez no sabía cuál escoger, además deslizaba delicadamente de lado a lado su dedo índice sobre sus finos labios, aquellos labios que cuando se encontraban en contacto con los míos me hacían perder en un solo segundo la cordura. Mientras el escoge un libro y empieza a abrirlo para leerlo, me decido en ir a saludarlo, antes de dar un paso respiro profundamente, muerdo mi labio inferior al mismo tiempo que agarro un mechón de cabello y lo coloco detrás de la oreja, aprieto los libros que cargaba contra mis pechos mientras pensaba ¿estaré haciendo lo correcto?.