~ Bob Welch - Ebony Eyes.
- Observación -
Les recomiendo colocar la song para crear ambiente.
(...)
Previamente
Luego de enfatizar aquello último hizo que la poca estabilidad emocional que me quedaba se fuera y para siempre, olvidé completamente mencionarle aquello.
ʕ•̫͡•ʕ•̫͡•ʔ•̫͡•ʔ•̫͡•ʕ•̫͡•ʔ•̫͡•ʕ•̫͡•ʕ•̫͡•ʔ•̫͡•ʔ•̫͡•ʕ•̫͡•ʔ•̫͡•ʔʕ•̫͡•ʕ•̫͡•ʔ•̫͡•ʔ•̫͡•ʕ•̫͡NARRA AYATO:
Su rostro luce inexpresivo y sin decir ni una sola palabra, sus grandes ojos marrones me miraban fijamente como si se encontraran perdidos en los míos, sus manos tiemblan por lo que me atrevo a sujetar estas con intención de tranquilizarla pero logré notar que sus palmas se hallaban heladas, su respiración aumentaba de a poco a la vez que sus mejillas se iban tornando de un rosado palo a un rojizo intenso. Siendo honesto conmigo mismo temo perder el control y volverme una bestia, mi respiración iba aumentando involuntariamente y mis deseos carnales invitaban a mis manos a arrancar de una vez por todas la poca ropa que aún cubría su tan apetecible cuerpo. La sangre me empieza a hervir, si fuera un chico caballeroso pediría permiso pero por suerte no soy nada de eso, siempre hago lo que me plazca, a mi modo, de una forma cruda y salvaje dejándolas suplicar por más.
Pero, hay algo que me inquieta a tal punto de llegarme a preguntar si alguna vez a Kaneki se le habrá ocurrido hacer lo mismo con ella, pienso que a ese bastardo le faltaron pelotas como para hacerla suya de una buena vez, mucho mejor para mi. Procedo a quitarme la camisa, fijo mi mirada en su rostro que observa embelesada y algo ruborizada todo mi torso esculpido, si pudiera describir con palabras esa acción sería algo como "comerme con sus ojos".
Apego mi pecho contra el suyo lo más que puedo, con el fin de hacerla sentir acorralada, mis manos traviesas empiezan a meterse entre sus bragas y si es posible introducir uno que otro dedo en ella, su rostro sonrojado cual carmesí y los dulces sonidos que salían desesperadamente de entre sus labios eran la perfecta combinación que perduraría en mi memoria hasta el confín.
Con mis manos ocupadas en otros asuntos, mis labios sentían la necesidad de disfrutar también así que con los dientes trato de dar jalones a su bra para soltarlo pero todos mis intentos fueron inútiles.
A: — ¡Mierda! —logro decir con desespero segundos antes de soltar un gruñido.
Atónitamente en ese instante observo como ___ no vacila en sacar aquella prenda molestosa por su cuenta logrando así dejarme ver sus tan apetecibles pechos. — Al fin y al cabo no resultaste ser una tabla de planchar. —digo con mofa.
_: — ¡¡Idiota!! —Dice enojada y a la vez cubriéndoselas por vergüenza.
A: — Fue una pequeña bromita, no te lo tomes en serio. —Digo para suavizar un poco su temperamento pero no luce convencida por lo que tomo sus manos y mientras las aparto de sus pechos exclamo— Siempre he soñado con chupar esos meloncitos. —No cabe duda, su expresión ingenua y confusa en estos momentos está logrando atraparme.
_: — No le pongas apodos, es raro. — Susurra aún avergonzada.
A: — Lo hago para que tú rostro me termine de excitar. — Exclamo ladino mientras le muestro a mi amiguito totalmente ansioso.
Ella solo suelta una pequeña risita burlona y lleva una de sus pequeñas manos a mi abultada entrepierna. — Veo que quieres jugar con eso, adelante. — Ella procede a desabrochar el pantalón y a quitar el bóxer logrando liberar así la creciente erección. Esta vez con ambas manos empiezan a tocarlo, apretarlo y a moverlo de un lado a otro. — No es una palanca de cambio, tonta.
_: — Lo siento. — Exclama mientras ríe imaginándose lo que acabo de decir.
A: — Espero que así te sigas riendo después de lo que te voy hacer. —Me abalanzo sobre ella y agarrando uno de sus pezones con mis dientes, aplico algo fuerza en mis mordidas para así deleitar mis oídos con gemidos de piedad, lo cual no tendré a partir de ahora. Con mis manos las aprieto y observo como rebotan por la sensibilidad que tienen al ser tocadas indebidamente ¡Joder! Su rostro es tan sexy en estos momentos. Procedo a succionarlos tanto del uno como del otro dejando así leves marcas en esta zona, subo un poco a su cuello para dejar también allí pero sin antes dejar una en especial, que se notara de lejos y que lo notara el estúpido de Kaneki.
Bajo de un solo toque sus bragas, estaba demasiado caliente como para esperar otro rato más, necesitaba estar ya dentro de ella, su rostro cambia de manera abrupta y en vez de estar ruborizado se encontraba algo pálido.
A: — Pequeña, no te asustes mi intensión no es romperte. — Digo algo molestoso para hacerla sentir en ambiente nuevamente pero esta vez veo que no funciona por el simple hecho de no haber recibido ningún insulto por parte suyo, supongo que como es su primera vez es normal que se muestre así, por lo que hago caso omiso y me pongo en posición agarrando sus caderas, ella cubre su rostro con una almohada, intento hacer un leve roce de intimidades antes pero ya no pude aguantarme más, introduzco mi pene de una sola estocada y noto algo, algo que para nada me agrado...NARRA RAYITA:
¡Mierda! No siento ningún movimiento suyo dentro de mi, ¡Se ha percatado! logro bajar levemente la almohada para confirmar si mi teoría era cierta y afirmativo. No logro ver por completo su rostro por los cabellos que le cubrían, en seguida sale de mi, sube sus bóxers y comienza a alejarse.
_: A-Ayato yo... — Me interrumpe.
A: — No tienes nada que decirme. — Dice frío sin voltearse.
_: — Quisiera explicárt...
A: — ¿De que ya fuiste follada por ese bastardo? Esperé ser tú primera vez en algo pero veo que tú y ese idiota no han perdido nada de tiempo.— Golpea la pared con furia.— ¿Aún lo amas verdad?
A pesar de todas las pendejadas que te hizo. ME DAN ASCO. —lo cacheteo.
_: — ¡TÚ NO SABES LO QUE HE PASADO! ¿Sabes lo que es que te tomen a la fuerza?, mi primera vez fue sin mi consentimiento, perdí mi dignidad, cordura y razón, caí ante la lujuria, antes de que me diera cuenta ya me había convertido en su juguete sexual, pensé que le gustaba porque sentí que empezó a empatizar conmigo e incluso pensé se había vuelto más gentil, también pensé que había comenzado cambiar su actitud por mi pero ahora solo podré decir que fui una tonta, una completa tonta al terminar enamorándome de un ser tan miserable como él, sólo fui una más y hoy pude comprobar eso. —sollozos.— ¿es mucho pedir que te quieran sinceramente? Entiendo que te de asco, créeme yo misma me odio, por eso quería que me mataras.
A: Me abraza.— No vuelvas a decir estupideces como esas.
Perdón.
_: Me asombro, ¿acaso el rebelde y orgulloso de Ayato se ha disculpado conmigo?.— Acaso...
A: Me vuelve a interrumpir.— Soy un bocón de mierda actúe antes de pensar, te prometo que ese hijo de puta se arrepentirá de haber nacido.
_: Me separo de el.— Gracias pero no quiero tu pena. —Digo firme, las palabras de Ayato hace unos minutos atrás fueron hirientes, además tenía razón, a pesar de haber querido tener algo serio con Ayato aún amaba a Kaneki, así que no pienso lastimarlo más. — Discúlpame por todo. —recogí mis cosas y salgo de la habitación, me parece escuchar murmullos pero antes de que me diera cuenta Ayato me arrastra a otra habitación cercana y cerrándola con seguro exclama más encabronado que antes.
A: —¡Mierda! Este día no podía empeorar. Vístete, tengo que sacarte de aquí.
_: —Ayato, ¿que pasó?. —Pregunto preocupada por la situación.
A: — Todos han vuelto antes de lo esperado al Aogiri.💀💀💀💀💀💀💀💀💀💀💀💀💀💀💀
HOLA CHIQUILLOS, ESPERO LES GUSTE EL CAP. BYE CRIATURITAS.🥰
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¿Me enamoré de un Ghoul? [Kaneki y tú]
Fiksi PenggemarUna joven pelicastaña vive en Japón desde que tiene memoria con sus padres, su progenitor fue un investigador de la CCG y falleció en combate a manos de ghouls sanguinarios. El día de su funeral llena de rabia se juró matar a cualquier ghoul que se...