¿Me enamoré de un Ghoul? [Kaneki y tú]

Cap 34 ▪️PERFECCIÓN ▪️

~Doja Cat -  Say So.

(...)

Intento despertarme pero siento una inmensa pesadez que recorre todo mi cuerpo, ¿qué fue lo que pasó ayer? ¿Por qué mi cabeza duele demasiado? Aún no lo entendía, el simple hecho de tratar de recordar la noche anterior hacía que esta doliera aún más, no tiene sentido tratar de recordar ahora, suspiré. Los intensos rayos del sol que entran por la ventana de mi habitación golpean directo a mis ojos por lo que me es difícil abrirlos de un solo golpe, mientras estos continúan cerrados trato de estirarme en la posición que me encontraba sobre la cama pero me es difícil ya que siento un curioso peso a nivel de mi vientre que me impide el movimiento, con una gran fuerza física y de voluntad logro girar todo mi cuerpo en dirección opuesta de un pequeño salto, una vez hecho eso exhalo audible, sea lo que sea no pensé que aquello tuviera demasiado peso, un soplido se propaga por cada rincón de mi rostro pero no le doy tanta importancia, me había enfocado en mis ojos, quienes creo ya se encontraban lo suficientemente descansados y en una posición contraluz que ya les permitían poder abrirse sin dificultad alguna.

— ¡Ahhhhhh! —Pego un grito ensordecedor, mis ojos no daban crédito a lo que veían, Ken Kaneki se encontraba durmiendo plácidamente a lado mío sin camisa bajo sábanas y una de sus manos eran la causa de mi inmovilidad, de inmediato dirijo mi vista sobre mi algo alterada y con el corazón palpitando desenfrenadamente pero logro calmarme una vez que me veo con una bata de tirantes puesta; no estaba desnuda, recriminó mi subconsciente tranquilo mientras exhalaba por segunda vez. Pero aún así ¿qué fue lo que pasó? Lo último que recuerdo fue que Juuzou vino a ver si me encontraba bien y luego... nada.
Dirijo nuevamente mi vista hacia Kaneki, su rostro se encontraba tan sereno que con solo verlo podía llenar todo mi ser y mi alma de una profunda paz, uno que otro cabello rebelde tapaban sus hermosos ojos y solo dejaba a descubierto su pequeña nariz y sus finos labios rosados, no dudé ni un solo segundo en ruborizarme, sonreí para mi misma pasando mi dedo índice por su mejilla delicadamente, tomé los cabellos que me impedían una mejor vista de su rostro y los coloqué hacia atrás. ¿Por qué tuvimos que pasar por tanto para llegar finalmente hasta aquí? ¿Será que por fin me merezco la felicidad? siempre he vivido con odio hacia los seres de su especie pero el y los suyos me están suavizando, por otro lado tengo bien en claro mi misión, lo que tengo que hacer con Aogiri.
Me gustaría que Kaneki quede fuera de todo esto, esta es mi pelea no la suya, no me siento preparada y peor aún lista en contarle acerca de mi plan, hoy es el día en que le diré a Arima todo lo que sé de Aogiri gracias a la última conversación que tuve con Ayato aquella vez, solo espero que en un futuro Kaneki comprenda lo que pienso hacer y no me odie por habérselo ocultado, estaría dispuesta a romper nuestra promesa solo por nuestra felicidad, odiaría perder más gente que en serio amo, no me perdonaría si eso llegase a pasar frente a mis ojos.
Aún no tengo en claro que clase de ghoul es Kaneki o que tipo de cosas toca en Aogiri, recuerdo muy bien haber escuchado su voz aquel día en que Ayato me llevó, él al contrario no pudo saber de mi presencia porque logré escapar a tiempo, hasta ahora no hemos tocado ese tema todavía, en lo personal tampoco me gustaría hacerlo, simplemente dejaré que las cosas sigan su curso.
De repente una pequeña pero visible sonrisa aparece en sus labios lo cual me saca sobresaltada de mis pensamientos.

— ¿Piensas despertarme con un grito todas las mañanas? —Musita en un tono irónico y manteniendo aún sus ojos cerrados.

— ¡I-Idiota! —exclamo muy colorada y desviando mi mirada. — Buenos días. —Musito aún con dificultad, ¡demonios! ya somos una pareja ¿no? debería dejar de una vez por todas esta estúpida actitud.

— Buenos días. —contesta a mi saludo mientras apega sus labios a los míos.— ¿No deberías estar en  tu trabajo? —Pregunta con una leve sonrisa.