¿Me enamoré de un Ghoul? [Kaneki y tú]

Cap 20 ▪️ENCUENTROS ▪️

~Cascada - Everytime We Touch.

(...)

Previamente
— ¿Y que esperas? ¿Quieres saber o no?. — Dice entregándome el objeto en las manos.

¿Que debería hacer en estos momentos?...
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(...)

— ¿Y?... — pregunta la enfermera agotando su paciencia, pero lo único que hago es devolvérselo.

— Debo hacer algo primero. —Digo saliendo de la habitación lo más rápido que pude.

No estaba lista para hacerlo delante de ellas, esto era algo íntimo y si quería saber pues Kaneki era la solución.
Necesitaba encontrar a Kaneki cuanto antes, conversar con el o no sé, solo sabía que necesitaba verlo.
— Falta cuarto para que sea las doce. —bufé, al mismo tiempo que pensé que tal vez los metros se encontrarían bastante llenos y tardarían demasiado tiempo en desplazarse de un lugar a otro.
Aunque hubiera querido tomar un taxi en estos momentos, por lo despistada que soy había olvidado mi billetera en casa esta mañana, así que lo más obvio que me tocaba hacer sería esperar.
Me senté sin aliento en una banca cercana hasta esperar que llegue el metro que pasa al medio día.

¡Ya sé!, hasta mientras, lo llamaré para saber donde se encuentra y evitarme el trabajo de andarlo buscando por todos lados.

NARRA KANEKI:

Anteiku.
Mientras friega los platos siente su celular vibrar en su bolsillo trasero del pantalón.

– ¡Demonios! Quien será –Se seca las manos y logra sacar con sumo cuidado su celular para contestar la llamada.— Hola. —Dice cortante.

— ¿K-Kaneki? — Dice entrecortadamente.

— ¿Si? ¿Quién es?. — pregunta confundido al no poder reconocer aún la voz contraria al teléfono.

— S-Soy ___. — Al momento que escucha su nombre siente como su corazón se comprime de un momento a otro de una manera inexplicable.

— ¿___? — Cambia su tono de voz por el de uno más suave. — ¿Te pasa algo?. — Pregunta preocupado al notar nerviosismo en las palabras ajenas.

— No, es solo... que quiero saber donde estas, iré a buscarte. — Dice la pelicastaña cambiando el tono melancólico por uno más alegre.

— ¡Kaneki! Sabes las reglas, No celulares mientras se trabaja. —Se escucha a lo lejos la voz del Jefe enfadado. Voltea a verlo algo enojado y haciendo señas al contrario que la llamada era sumamente importante pero este solo niega con la cabeza antes de retirarse.

— A las 12 termina mi turno, te esperaré fuera de Anteiku ¿no hay problema?. — Dice casi susurrando al móvil.

— No, no lo hay... Nos vemos luego. —Cuelga en seguida la llamada.