Intento de chica perfecta

Capitulo 20 "Noelia"

     Sus ojos me miran nerviosos, ansioso y temerosos como si temiese de verdad mi reacción, y por un momento por mi cabeza pasan imágenes macabras y sangrientas. Todas son similares, soy yo matando de mil maneras distintas al idiota de Fran. Ni siquiera sé como aun no lo he hecho.

- Abre esa bocota que tienes si no quieres que te deje desdentado y creo que tu madre ya se gastó mucho dinero en el aparato - digo furiosa escupiendo cada una de las palabras.

Digo escupir porque casi parece que le estoy escupiendo. Venganza, al menos es lo máximo que puedo hacer hasta que sepa toda la historia, luego le romperé los huevos, le sacaré un ojo o simplemente le ahogaré en la bañera si es que no le hago tragarse lejía antes.

Lo sé, se me puede confundir por un dulce pastel.

Pero es que a pesar de que sabía que me iba a contar algo con respecto a Noelia, nunca pasó por mi mente que tuviese algo que ver con su muerte. Siempre lo achaqué a un desaforado accidente sin culpables, saber que quizá no fue tan fortuito... despierta nuevos dolores en mí.

- Bien, desembucha, me estoy impacientando - vuelvo a decir.

- Es difícil para mi Lily, ¿no lo entiendes? - pregunta nervioso llevándose las manos a la cabeza - el sentimiento de culpabilidad me carcome incluso el día de hoy. Lo cierto es que unos meses antes de que tu hermana muriese había empezado a verme a escondidas con ella, me había confesado que yo le gustaba y yo había aceptado sus sentimientos... ¡había empezado a salir con tu hermana! - grita nervioso a punto de romper en llanto - pero siempre fui más unido a ti, me gustaba tu forma de ser, tan despreocupada haciendo que la realidad te resbalase para seguir siendo tu, tus locuras, tu misma - añade y ver como las lágrimas descienden por sus mejillas me hace sentir mucho más vulnerable, porque para mi Fran es importante y verle tan triste me hace sentir la peor persona del mundo.

Durante mucho tiempo he estado tan cegada por mi propio dolor que me olvidé de que no era la única que estaba sufriendo, me olvidé de Fran y de lo que para él pudo significar Noelia y su muerte. Verle de este modo frente a mi, tan vulnerable, tan perdido, me hace abrir mis ojos y darme cuenta de la realidad.

He sido mala y cruel con él, deberíamos haber estado apoyándonoslas mutuamente y, en cambio, no lo hemos hecho como los dos idiotas que somos.

- Continua - pido tratando de retener mis propias lágrimas en mis ojos.

Lo que no puedo hacer en este momento es llorar de la forma en la que lo está haciendo él, si yo rompo a llorar de esa forma siento que no podremos hablar del tema como me gustaría y debemos aclarar esto sin atrasarlo más.

- Tu hermana se ponía muy celosa cuando nos veía juntos, es cierto que sentía cosas por ti, pero tu no me veías como nada más y trate en todo momento de olvidarme de mis sentimientos por ti, realmente quería enamorarme de Noelia porque sentía que merecía la pena hacerlo, ella era igual de asombrosa, de una manera muy distinta a ti, pero ella también era una persona que deslumbraba - explica cabizbajo, parece como si recordase el pasado junto a ella - Noelia sabía que algo sucedía entre nosotros desde el principio, al parecer era más obvio de lo que pensaba, al final acabó descubriendo algo de lo que aun me arrepiento porque ella no merecía que yo la usase de esa forma, ella merecía que yo la quisiese de verdad, merecía respeto y amor, no lo que estaba recibiendo por mi parte. Noelia descubrió que la estaba utilizando para darte celos a ti, a ella no la quería de la misma forma, siempre te quise a ti, Lily - me confiesa y es entonces cuando la realidad me golpea.

¿Mi hermana me envidiaba por el amor de Francisco hasta el punto de que llegó a odiarme? Nunca nos habíamos envidiado, nunca nos habíamos celado o nos habíamos sentido inferior la una con la otra, nos completábamos de tantas formas que el estar juntas era sentirnos una y eso era algo que nos beneficiaba, lo que nos convertía en las buenas hermanas que éramos, lo que nos convertía en almas gemelas, pero... ¡Fran destrozó aquello!