Parte 7 (Acampar)

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"Han pasado tres días desde aquel incidente. Elizabeth sigue sin dirigirme la palabra y evita mirarme cada vez que nos cruzamos por los pasillos o a la hora de la comida. Trato de no darle mucha importancia, a fin de cuentas papá me dio una orden y yo la cumplo contra viento y marea. El entrenamiento de mis hermanas con la magia poco a poco está progresando, Cressie mejora cada vez más con los hechizos del libro e increíblemente fue capaz de crear el suyo propio, si continuamos así muy probablemente el manejo de la varita será todo un éxito y podrá pasar al siguiente nivel. Mientras tanto yo debo seguirlas cuidando, odio hacerlo, pero es mi deber, papá y la reina Star confían en mí, así que debo esforzarme".

Jam terminó de escribir en su diario y lo guardó en uno de los cajones del escritorio. Se quedó en silencio por unos minutos y después suspiró recostando la cabeza entre sus brazos deseando tener algo de paz. En ese momento alguien tocó la puerta.

-¿Si? –Respondió algo desganado

-Buenas tardes campeón –Lo saludó alegremente Marco

-Buenas tardes papá...

-¿Ya almorzaste?

-Si, los sirvientes trajeron la comida hace una hora

-Muy bien entonces cámbiate y baja al salón, es hora de tu practica de piano

-¿Qué? –Jam lo miró sorprendido -¿Es en serio papá? ¿Piano? –Preguntó algo fastidiado

-Pues sí, ¿Qué creías? ¿Qué ibas a vaguear todos los días?, no señor, nada de eso –El hombre se puso ambas manos en la cintura –Tu mamá dice que los fines de semana te la pasas acostado sin salir de casa y sin realizar actividades físicas, eso no es sano hijo

-Tsk....mamá siempre exagera las cosas –Rodó los ojos –Practico karate casi todos los días después de la escuela, voy a la biblioteca a estudiar durante el receso y ensayo con el piano en casa después de cenar –Se quejó

-Lo sé campeón, pero igual no quiero que descuides tus estudios ni que dejes de lado tus lecciones, así que mientras estés aquí practicarás con el piano al menos un día a la semana

-Ugh....pero papá.... –Protestó -¿De verdad es tan necesario?, estoy de vacaciones

-¿Prefieres pasar cinco horas repasando el diccionario? –Marco se cruzó de brazos y sonrió de medio lado

Jam se pegó un palmazo en la frente.

-Olvídalo, me quedo con el piano....

-Ese es mi chico –Dijo revolviendo sus cabellos –Tengo que ir a una reunión así que no podré estar presente para supervisarte, sin embargo no quiero que dejes de practicar, ¿entendido?

-Sí señor

-Bien –El hombre salió de la habitación cerrando la puerta

-Ugh.... –Jam apoyó su espalda en la silla mirando fijamente al techo –Y yo que creí que las cosas no podían empeorar más....

Sin la intención de volver a protestar, el joven se puso de pie y fue hacia el gran armario que se encontraba en su habitación para sacar algún atuendo formal y bajar. Minutos después salió de su habitación vistiendo una camisa blanca junto con un chaleco gris y un pantalón fino de color negro.

Bajó tranquilamente las escaleras para dirigirse al salón en donde se encontraba el piano y así practicar como le había ordenado su padre, sin embargo al caminar por los pasillos escuchó algo que llamó su atención. El muchacho alzó una ceja y giró la cabeza hacia una de las puertas que estaba cerca de allí, justo donde provenía aquella melodía la cual le parecía bastante conocida. Al acercarse cuidadosamente y mirar por el entremedio, se dio cuenta de que al parecer no era el único que se hallaba ocupado esa tarde, pues sus hermanas también lo estaban tomando sus clases de ballet.

Un Nuevo Héroe En Mewni [PRIMERA PARTE] (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora