Capítulo 33: Bestia anormal.

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Parte 1.

Y desde esa noche tan ¿extraña? Tres semanas se pasaron en un pestañeo.

Actualmente el grupo ha logrado completar su recorrido y se han asentado en un pequeño bosque a las afueras de Lowe para tomarse un descanso antes de ir a buscar y enfrentar al ogro que se les ha encargado eliminar, tal parece que ninguno de ellos estaba preparado para un viaje que se prologara durante tanto tiempo o estaban emocionados porque finalmente tendrían la oportunidad de cumplir con esa misión que llevaba semanas sin ser resuelta, pero nadie llevó el equipo necesario para mantener un buen ambiente y con equipo, bueno, el dinero y comida hicieron falta por montones.

Dicho de otro modo, desde el tercer día de viaje se optó por mantener la ruta recta y acampar a las afueras de las ciudades y pueblos para ahorrar lo suficiente en comida. Considerando que Teitoku y Mila no tenían dinero extra gracias al equipo que compraron con Morgana, al final se hizo una decisión grupal y las comidas han sido atrapadas día con día.

Carne de un animal parecido a los conejos y a los jabalíes es de lo que Teitoku se ha tenido que encargar de cocinar.

Por cierto, no pasó mucho para que todos demostraran que eran capaces de ciertas cosas.

Cuando el grupo se detenía a acampar en algún punto, Mila y Hans se coordinaban y establecían algunas horas de practica para mantener el estado físico de todos en buen estado.

Peleas por la mañana y por la tarde. Incluso la caza y recolección de materiales debía ser resuelta en parejas para aumentar el compañerismo y confianza entre todos.

Algo que ha resultado favorable ya que Teitoku ha sido capaz de aprender algunas cosas básicas para la supervivencia mientras que Mila parece disfrutar mucho su tiempo ahora que se ha vuelto una aventurera, contradictorio ya que ella era la que tenía más dudas de unirse, pero esto es algo bueno, verla disfrutar de la compañía de los demás y las labores alienta a Teitoku a mantener su palabra. Sin embargo, todavía hay algo que lo molesta un poco.

Desde la primera pelea de entrenamiento que tuvieron todos, se creó un pequeño registro de habilidad y él quedó en el último lugar, dejando de lado que podría bien superarlos a todos en fuerza bruta, la forma de pelea que tienen y sus estilos de combate son muy buenos, se puede notar por mucho que están acostumbrados a ese tipo de vida.

Pero no es del todo malo, gracias a eso ha podido aprender una que otra maniobra basándose en lo que ha visto de los demás. Lamentablemente cosas como la arquería de Sarah y la buena magia de apoyo de John son cosas que siguen muy lejos de sus capacidades.

Como ya se ha vuelto una costumbre en él, día y noche cuando tiene ratos libres en los que se puede separar de los demás ha intentado usar su mana o algo de magia, pero los resultados siguen siendo todavía inútiles...

Por ahora, Teitoku -que se separó del resto para variar- ha encontrado un pequeño lago en el centro del bosque y se subió en una enorme roca desde la cual podía ver perfectamente la vista que ese lugar otorgaba, sintiéndose un poco molesto porque gracias a esto pudo recordar aquella nada satisfactoria sensación de una "niña" con un poder tan amenazante, su estado de ánimo ha caído completamente.

Dejándose caer encima de la roca, se recostó en silencio y sólo ha mantenido su mirada en el cielo viendo pasar la infinita cantidad de nubes que lo cubren.

Ahora que lo recuerda desde hace una semana el clima ha estado cambiando y se ha vuelto más fresco, el viento sopla constantemente y las nubes tapizan los cielos incluso por la noche, considerando esto ha llegado a la conclusión de que el invierno ha comenzado, una época del año que le gusta, principalmente porque odia el calor.

Isekai no VigilantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora