Los chicos se dirigieron hacia el nuevo loft de Magnus, el cual había sido un regalo de Ragnor para los chicos cuando se encontraran nuevamente y lo aprovecharían con creces. No se molestaron en utilizar un portal, los dos se fueron conversando hasta el loft mientras hablan, se reconocían, recordaban aquellos momentos que eran tan especiales para los dos. ¿Qué prisa tendrían los chicos si estaban con la persona que más amaban? El solo hecho de poder hablar, rozar sus manos, sentir la cercanía del otro era maravilloso.
Cuando llegaron al loft, Alec comenzó a sentirse nervioso y Magnus lo miró con preocupación.
-Alexander, si no quieres hacerlo, no...
-No –interrumpió Alec–. Es decir, sí, quiero hacerlo, de verdad –musitó avergonzado por lo urgida que sonaba su voz; tan urgida que el brujo se estremeció y su sangre caliente se fue a lugares no muy correctos, qué tan pronto Alec miró, se sonrojó aún más.
-Es un lindo lugar el que tienes aquí, no lo recuerdo.
Magnus sonrió divertido mientras tomaba de la mano a Alec para atraerlo hacia sí mismo y abrazarlo contra su pecho.
-Y no tendrías porque –musitó el brujo–. Tío Ragnor me lo regaló para que viviéramos en él cuando nos encontramos.
-Tío Ragnor de verdad tenía la esperanza de encontrarme.
Magnus lo miró como si estuviera loco.
-Pero por supuesto que sí, lo hubieras visto, estaba tan triste...
-Magnus todo lo que pasó...
-Cállate Alexander, ya te dije que no quiero recordar el pasado.
-Vamos, el pasado es importante.
-Sí, el pasado es importante porque de él podemos aprender, podemos aprender de nuestros errores, pero ya déjalo en paz, no sigas viviendo en el pasado si no te quedarás allá y te perderás de las cosas increíbles que tiene el futuro.
- ¿Cómo qué? –Preguntó Alec sonriendo; Magnus comenzó a arrastrarlo hasta la habitación.
-Estaré encantado enseñártelas, por supuesto, sólo si tú lo deseas.
Alec estaba completamente sonrojado, su corazón latía con desenfreno y sus ojos estaban oscurecidos por el deseo.
-Por supuesto que sí, Magnus.
-Entonces no hay tiempo que perder –musitó el brujo antes de cerrar la puerta con seguro mientras que con Alec en la cama el brujo recuperaba todo el tiempo que habían perdido.
Fue una buena noche.
Dos corazones, dos almas y dos cuerpos se encontraron y se fundieron para convertirse en uno solo.
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Weird boys (MALEC)
FanfictionMagnus Bane es un niño aparentemente extraño que solo un par de personas entienden, aquellos que son parte de su mundo, el pequeño creció aislado sin entender porque el mundo lo odiaba; el pequeño siempre creyó que nadie podría quererlo, hasta que u...