Capítulo 11

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- ¡Suéltame idiota, soy yo! –Gruñó Isabelle dándole un fuerte codazo a Alec, el cual la soltó un quejido adolorido.

-Demonios Izzy ¿Qué haces aquí? –Preguntó Alec molesto–. ¿No deberías estar en la escuela? Este es un lugar peligroso.

-Eso debería decirte yo a ti, Alexander, espera un momento –Isabelle le tomó con fuerza la mano a su hermano y frunció el ceño–. ¿Esta es una runa de clarividencia? ¡Tienes runas en todo el cuerpo Alexander Lightwood! Cuando mamá se entere que tú estás siendo un Nefilim activo te matará.

-Mi mamá ya lo sabe.

- ¿Espera qué? ¿Te dejo entrenar?

Alec asintió.

-Sí, por supuesto que sí, entreno desde los doce años.

- ¿¡Qué!? –Gritó Isabelle–. ¿¡Y a mí no me han dejado entrenar!?

-Chicos, disculpen... –empezó a hablar Clary arrodillada junto a su madre, pero todos la ignoraron.

-Isabelle, este momento no tengo tiempo para pensar en eso –Alec se giró hacia Jace–. ¿Tú lo sabías? ¿Sabías que tenía la espada y el espejo?

-Alec hermano, Magnus no quería preocuparte...

- ¡Al demonio con eso! ¡Se supone que somos Parabatai! ¡Se supone que puedo confiar en ti! ¿Es que no lo entiendes Jace? Mi novio, mi madre, mis tíos ¡mi familia está en peligro! ¡Y tú sólo decidiste callártelo porque Magnus te pidió que no me lo dijeras!

-Pero aún hay esperanza... no tiene la copa.

- ¡Puede encontrarla en cualquier momento! Estamos hablando de Valentine, es un asesino en masa, quiere levantar al ángel Raziel para acabar con las personas que amo y tú te lo callas –Alec empujó al rubio con fuerza.

- ¿Qué demonios está pasando Alexander? ¡No me ignores! –Gruñó Isabelle–. ¿Por qué entrenas y yo no puedo hacerlo?

-Isabelle, en este momento no quiero pelear contigo, tengo cosas más importantes que hacer.

- ¿Chicos por favor pueden ayudarme? –Imploró Clary desesperada.

- ¿Es que cómo pude confiar en ustedes? –Preguntó Isabelle–. La reina Seelie me envió un mensaje diciéndome que no confiará en ustedes.

- ¿Ahora te comunicas con ella? –Preguntó Alec molesto–. Es engañosa...

- ¡Ellos no pueden decir mentiras!

-Pero la retorcerán hasta volverte loco.

-Pero no dijo mentiras, no puedo confiar en ustedes.

- ¡Yo no puedo confiar en él! –Alec señaló a Jace.

- ¡Pero magnos...!

- ¡No culpes a Magnus! ¡Eres mi Parabatai! Él sólo quiere protegerme...

-Yo también...

- Y tú quieres protegerme tanto que no me dejas entrenar –gritó Isabelle mirando mal a su hermano.

-Chicos por favor –pedía la pelirroja sacudiendo su madre que no despertaba.

Weird boys (MALEC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora