Weird boys (MALEC)

Capítulo 14

-Ya está todo listo –murmuró Isabelle con una bolsa de lona en la espalda mientras entraba a la habitación de Alec junto con Clary una vez se aseguraron que el Maryse estaba durmiendo –las armas ya están empacadas.

- ¿Mi arco también? –Preguntó Alec sonriendo abiertamente; Magnus lo miró con complicidad y le besó sonoramente la mejilla.

-Por supuesto que sí –dijo Isabelle mientras miraba a los chicos burlona; Clary y Jace no entendían las miradas que se daban esos tres chicos y el porqué de ellos nosotros.

-Ya tenemos trazado el plan.

-Dime por favor que no fue Jace el que planeó.

El rubio parecía ofendido, Clary arqueó una ceja.

- ¿Pero no es que Jace es uno de los mejores Nefilim que existe?

-Soy mejor querida –corrigió el rubio.

-Sí, quizás lo sea, pero Jace está enamorado de la idea de morir –señaló Isabelle–. Y yo no.

-Yo tampoco –dijo Magnus–. Todavía me queda mucho por vivir –sonrió abiertamente; Clary tragó grueso.

-Sí, yo tampoco le veo nada atractivo a eso.

Jace miró furioso a los demás.

-Yo no estoy enamorado de la idea de morir...

-Además –interrumpió Alec, Magnus y yo nos encargamos de trazar el mejor plan de ataque.

Las chicas parecieron más tranquilas al escuchar eso.

-Por fuentes confiables –empezó Magnus–. Y mucha ayuda de la reina Seelie –admitió–. Sabemos que Valentine tiene la copa mortal –al escuchar eso, Alec parecía realmente aterrador pero el brujo prosiguió intentando que no se notara el terror en su voz mientras tomaba la mano de su novio–. No piensa levantar al Ángel hasta mañana, hay algunos detalles que quiere arreglar, está organizando a todos sus hombres para que nadie interrumpa su ceremonia, por lo cual tenemos que partir esta noche a Idris si queremos llegar a tiempo.

-O antes –señaló Isabelle–. Mejor llegar antes, no necesito el drama de estar a punto de perder a mi familia para salvar el mundo.

Alec asintió en acuerdo con lo que decía su hermana.

-Si yo tampoco necesito eso.

- ¿Entonces nos iremos ya? –Preguntó Clary sorprendida.

-Bueno hemos pasado dos semanas entrenando para que ustedes dos no mueran, esperemos que el teñido sea un buen entrenador.

- ¡Ya dije que no soy teñido! Pero sí soy bueno entrenador –refunfuñó Jace.

-Entonces andando –animó Clary.

-No es tan fácil, tenemos que ir llegar a la frontera de Idris, no puedo abrir un portal directamente allí.

Todos parecieron preocupados por ello, tendría que caminar mucho, el cansancio no era su preocupación, sino el tiempo que perderían. De pronto Clary pareció realmente aturdida, parpadeó con rapidez y sacó la estela qué Isabelle le había regalado; todos la miraron confundidos cuando Clary empezó a hacer trazos con su estela en el aire. Después de un rato todos quedaron realmente sorprendidos al ver aquel espejo que parecía quererlos absorber. Clary había abierto un portal.