Capítulo 6 - Give Your Heart a Break

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*Te veo hoy a las siete en The Coffee Cake*

—Por cierto, Max Westernann, mucho gusto— se alejó lentamente.

—Darissa Lyndom— se iluminaron mis ojos. "Aquí vas de nuevo Darissa". Estaba como en trance —¡Oh, Oh! espera... dijiste *alguna vez*, no precisamente hoy...  —asintió sexymente.

—¿Para qué esperar? ¿Tienes planes?— lo acababa de conocer y tenía una cita con él, Bueno ¿Era un cita? Me quede muda.

—... te veo más tarde— al no escuchar mi respuesta, se alejó y atravesó la puerta roja de la cafetería.

"No es tu día, no es tu semana. ¡Huye! aún es tiempo".

La parte atrevida de mi quería ir pero la otra que era cautelosa, me ordenaba a gritos que no asistiera.

¿En verdad lo estaba considerado?

"Por dios, ¿Qué más puede pasar?... Vamos" me alenté.

—¡A SU CLASE LYNDOM!— sentí que mi tímpano había atravesado mi cerebro por el grito del prefecto.

—¡Si, Sr. Dave!— respondí aun pérdida en mis pensamientos.

—¡Ahora! lleva diez minutos ahí parada, las clases ya comenzaron. Usted parece perdida en sí— sostenía un pequeño cuaderno en sus grandes manos.

Me daba miedo, no sé si solo era mi imaginación pero este parecía sacado de una película terrorífica.

¿Perdida en mi misma? ¿Eso provocaba en mí?

"Basta Darissa. Concéntrate. ¡Aquí, Aquí!"


——-


Miraba por la ventana mientras vagaba por mis pensamientos. Sonó el último timbrado dándonos a saber que prácticamente éramos libres y podríamos disfrutar de nuestro aclamado fin de semana.

Un tumulto de alumnos caminaba en los pasillos en dirección a la salida, me tuve que desviar hacia el laboratorio. Aun no era libre.

Iniciaba la sorpresa.

Una pequeña llama se prendió dentro de mí. En este momento era raro sentirla, hacía tiempo que no estaba presente.

Había desaparecido hace tiempo y tenerla de regreso se sentía de maravilla. Y con ella venia una serie de emociones que toman el control de mí, convirtiéndome en otra Darissa. La vieja Darissa.

"Estamos de regreso, haz estado tolerando demasiado. Yo ya estoy cansada y tú también, admítelo. Vamos, sé que quieres volver, está es tu oportunidad... la aprovechas o te hundes, decide ahora" mi subconsciente tenía razón estaba cansada de mi cambio y por horrible que era mi yo anterior, era mejor que estar en mi posición actual. El cambio me hizo mal, al menos eso es lo que yo pienso. Estoy segura de ello.

Desde hace medio año, la nueva Darissa había tomado el mando.

Del egocentrismo a la solidaridad. ¿Qué cambio no?

Cansada de llevar tanto peso sobre mis hombros, decidí renovarme. Cambiar los momentos de extremo estrés por unos de diversión y peor aún, el perfeccionismo por la relajación. ¡Qué error había cometido! La mayoría de las cosas no habían cambiado, de hecho algunas empeoraron. El cambio no fue correcto, solo me había escondido de mis problemas en vez de enfrentarlos o por lo menos dejarlos a un lado y no tomarlos en cuenta como solía hacerlo.

Los cambios ¡NO! Son buenos, son una desgracia. A partir de ahora ese sería uno de mis nuevos lemas.

Estaba parada frente a la puerta que me dividía de la sorpresa. Entremos.

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