Capítulo 2: La felicidad egoísta.

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Caminando a un paso apresurado, Lio navegaba entre el mar de gente pululando, intentaba llegar rápido al cine. Iba tarde, como siempre, pero no parecía importarle. Su cabeza se encontraba en otro lado, pensando en otra cosa. Cuando después de un momento él logra llegar al cine, y ve a Jonathan sentado al lado de Jolyne hablando con una mujer que estaba dándole la espalda a Lio. «Ella debe ser». Pensó Lio mientras se acercaba, Jonathan se percataba de su presencia y se levantaba a saludarlo.

—¡Hola! ¿algo temprano no crees?

—Agradece que vine el mismo día.

—¡Hola Lio! ¿No saludas? —gritó Jolyne agitando la mano—. Ven acá. Te presento a mi amiga Elisabeth. Eli, él es mi amigo Lio.

Intercambian saludo y se sientan de nuevo a hablar. Lio pasa un momento detallando de forma minuciosa a Elisabeth mirándola de forma disimulada. Buscándole algún defecto visual, pero ella era hermosa. Desde su cabello totalmente oscuro, corto por apenas debajo de los hombros y lizo. Hasta su sonrisa, brillante y viva. Pasando por su piel blanca pero tocada levemente por el sol y sus ojos marrones oscuros. Sin ningún tipo de imperfección visible. Sin nada destacable, lucia como una persona común y corriente, pero era simplemente hermosa.

—Te vez hermosa, mucho para ser amiga de Jolyne —agregó Lio mientras le guiñaba el ojo.

—Gracias —respondió soltando una leve carcajada.

—¿Gracias?

—Tú también te ves bien... no tanto como para ser amigo de Jolyne —respondió con mucha seguridad. Rieron al unísono Jolyne y Jonathan.

—No sé qué haces aquí en realidad —respondió Lio con una carcajada apenada.

Elisabeth mantiene una confusión en su rostro y se mantuvo tentada a preguntar. —¡Bueno! ¿qué vamos a ver? —preguntó Jolyne con mucho entusiasmo.

—¿Qué les parece algo de terror? —respondió Jonathan señalando una película.

—No sé...me ponen nerviosa esas películas. —replicó Elisabeth avergonzada.

Jonathan se reclina contra la silla. —Vas a tener un hombre que te cuide y a Lio, nada malo te pasara. —respondió mientras jugaba dándole vueltas a su teléfono sobre la mesa.

—Tiene razón, vamos a ver la película se entretenida al menos —agregó Jolyne.

—No sé... ¿qué opinas tu Lio? —preguntó Elisabeth.

—¿Ah? bueno yo digo que a ellos no les importa porque no la van a ver, solo es una excusa para matarse a besos. Pero me quiero reír un rato y llevaba tiempo sin ver algo de comedia así que... seh vamos a ver la peli de terror. —agregó Lio mientras veía con una sonrisa a Elisabeth.

—¿Hablamos de la misma película? —interrogó desconcertado Jonathan.

—Vaso medio lleno, medio vacío. Da igual, no deja de ser un vaso con algo adentro —respondió Lio mientras veía a los lados buscando evitar el contacto visual.

—Está bien, veamos la película de terror. —dijo Elisabeth mientras se levantaba.

Después de tomarse unos minutos para comprar las entradas fueron directo a la película. Ya levantados Lio pudo detallar mejor a Elisabeth. Estaba vestida con un short que dejaba ver sus pálidas pero voluminosas piernas, su camisa escotada y su labial rojo la hacía resaltar. No gozaba de un cuerpo muy provocativo, estaba justo, su cuerpo estaba bien desarrollado, era hermosa. Al momento de entrar Jonathan y Jolyne estaban abrazados caminando mientras que Elisabeth caminaba a la par de Lio mientras este jugaba con sus dedos. De un momento a otro Jonathan lo aparta y Jolyne se pone a hablar con Elisabeth.

El Camino de Redeem. (Old Version) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora