-Muy bien, sólo respira Jen- le dice Josh masajeando sus hombros.
-Es lo que intento hacer – responde Jennifer frunciendo el ceño.
-Pero no lo haces lo suficientemente bien – vuelve a decir Josh mientras baja sus manos a los brazos de su mujer.
-¿De qué mierda hablas? Deja de hacer eso, me desconcentras – responde Jennifer y se sacude para deshacerse de las caricias de Josh. Él solo la ignora y sigue con sus caricias bajando a ya abultado vientre de Jennifer.
Jennifer pone los ojos en blanco, pero sigue cortando los vegetales para la comida. Normalmente ella no cocinaba, pero hoy se sentía con ganas de hacer algo productivo además de que tenía antojo de un salteado.
Josh apoya su mentón en el hombro de Jennifer y sigue observando como ella sigue cortando los morrones. Jennifer vuelve a tratar de zafarse del abrazo de su novio, pero Josh ni se inmuta.
-Me estás distrayendo. ¿Los sabes?- le pregunta Jennifer mientras pone los trozos de las verduras en un plato.
-Puedo cocinar yo y así tú descansas. ¿Lo sabes?- le hace también esa pregunta apartándose y saca una sartén de uno de los armarios.
-No seas ridículo, no estoy inválida – le dice Jennifer cruzándose de brazos y apartándose ya que Josh volvía a tomar el control de la cocina. Josh solo le sonrío y encendió la hornalla.
- Ya sé, pero no quiero que te canses o te lastimes- le dice Josh serio y luego vuelve a poner su atención al salteado. Toma el pollo y los arroja a la sartén como un profesional.
-Además soy mejor cocinero- le vuelve a decir con una risa divertida. Jennifer lo mira con una falsa indignación y le da un pequeño puñetazo en el hombro.
-Idiota- le dice Jennifer con una risa y besa en la mejilla a su novio y sale de la cocina.
Jennifer va al salón y se sienta. Pippi viene a su encuentro y ella la acaricia mientras espera a que su antojo esté terminado. Todavía le parecía una locura que ella estuviera de 4 meses de embarazo. Cuando se enteró no lo podía creer, pero esa pequeña noticia de que un ser que es en parte ella y Josh la emocionaba. Nunca pensó que llegaría ese momento. Sus padres se habían sorprendido mucho ya que habían pensado que ella ya había abandonado la idea de ser madre.
Una sonrisa aparece en el rostro de Jennifer al recordar lo emocionado que Josh había reaccionado. Todo era perfecto. Y ahora además de estar unidos como amantes, lo estarían como padres.
-La comida ya está lista- dice Josh interrumpiendo sus pensamientos. Jennifer se levanta y camina hacia su sonriente novio. Los ojos color avellana la miran con amor. Ella acaricia su barba de pocos días y le da un beso en los labios.
-Gracias- le dice Jennifer y camina a la mesa. Ambos se sientan y Jennifer ríe al ver toda la comida en su plato.
-¿Acaso quieres engordarme?- pregunta Jennifer y le da un bocado al salteado y su paladar baila de lo sabroso de la comida.
-Algo así- responde Josh también comiendo sin dejar de mirarla. Josh a veces era muy cursi y eso le encantaba.
-Luego podríamos también terminar con mi antojo- dijo Josh metiendo un bocado enorme en su boca. Jennifer lo mira divertida y hace una mueca.
-También tengo ese antojo- le dice Jennifer y roba un trozo de pollo del plato de Josh.
-Bien, entonces terminemos esto- dice Josh y Jen ríe.
A veces las cosas pueden mejorar, después de la tormenta y de tanto caminar sin un destino específico, un hilo de luz puede asomarse y mostrarte el rumbo que debes tomar porque el viaje apenas ha comenzado y ellos lo sabían.
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Este OS está dedicado a mis amigas Beatriz y Micaela, gracias por el apoyo y por aguantarme. :)
