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Aquella primera semana de julio terminó en un abrir y cerrar de ojos y mi cabeza se encontraba en todas partes excepto encima de mi cuello, no tenía ni idea de qué pensar sobre nada. Desconecté por completo de mis problemas sociales, no quería saber nada de ellos, así que me volqué en mi trabajo y, cuando no lo hacía, me distraía hablando con Jimin, Taehyung o Jungkook, con este primero cumpliendo finalmente con nuestra cena.

Lo cierto es que me encantaba pasar tiempo con Jimin y volver a empezar desde cero con él me había dado la oportunidad de verlo con nuevos ojos y apreciarlo, si era siquiera posible, incluso más que antes. Nuestra amistad había vuelto y era más fuerte que nunca.

Por otro lado la situación con Taehyung no había cambiado, estaba realmente ocupado y no podía ir a mi casa a visitarme como antes pero dedicaba sus descansos a pasarlos conmigo llevándome a comer con él o simplemente hablando en un rincón de las oficinas de Big Hit, y aquellos eran mis momentos favoritos del día. No podía esperar hasta mi hora libre para verlo y, cada vez que me encontraba con él, sentía como mi corazón se aceleraba y una sonrisa aparecía en mis labios incapaz de ser borrada. Sin embargo, conforme pasaban los días comencé a darme cuenta de que esto conseguía pasarme incluso cuando no lo veía, ocurría hasta cuando solo me detenía a pensar en él.

Me encontraba volviendo a mi puesto de trabajo tras mi descanso para comer aunque aún mi hora de ocio no había llegado a su fin, pensando en el rato que había pasado con Taehyung en el almuerzo antes de que se despidiera de mí para ir a recoger rápidamente un recado antes de regresar a la sala de ensayos. A sabiendas de que era temprano para volver a mi escritorio —o, lo más seguro, a entregar cafés como siempre— me permití el lujo de ralentizar mi paso por los pasillos de la compañía mientras ojeaba mi teléfono móvil, revisando los mensajes de Hyuna que llegaba esa misma noche de Busan por fin.

En el momento que bajé mi mirada y me detuve en mitad del corredor para guardar de nuevo mi teléfono móvil en mi bolso tras responderle a mi compañera de piso, algo llamó mi atención de reojo dentro de la sala en cuya puerta me había parado casualmente.

Rodando los ojos entré en la habitación iluminada plenamente, en la cual habían un par de mesas grandes con sillas, máquinas expendedoras de refrescos o simples snacks y un par de sillones que seguramente estaban hasta arriba de polvo, era la zona de descanso de la oficina y, a mi juicio, era un poco sosa y simple con necesidad de algo más colorido para decorar o evitar que se viera tan vacía. Sin embargo, lo que captó mi atención desde el primer momento fue el cuerpo de un chico tumbado sobre uno de esos sofás, encogido en sí mismo para poder hacer cabida a su enorme cuerpo en el mueble.

Me acerqué hacia él sin poder evitar una leve sonrisa en mis labios al verlo completamente dormido con la boca ligeramente abierta y una expresión de tranquilidad plena en su rostro. Llevaba puesta una sudadera negra y la capucha de esta la llevaba puesta haciendo que su cabello oscuro se perdiera en ella salvo por un par de mechones que caían por su frente.

No pude evitar entonces apartar uno de estos mechones con delicadeza y cuidado para no despertarlo, a sabiendas de que debía molestarle el tacto de su pelo con su párpado cerrado, pero acabó reaccionando a mis movimientos frunciendo la nariz y relamiéndose sus finos labios, cosa que me extrañó pues aquel chico tenía el sueño realmente profundo, hasta que finalmente entreabrió los ojos con pereza y sonrió, dejándome ver todos sus blanquecinos dientes que tantas veces habían sido comparados con los de un conejito.

—¿Estoy soñando? —preguntó sin dejar de sonreir, mirándome desde abajo con párpados pesados cerrándose cada dos por tres por el cansancio—. Porque es el sueño más bonito que he tenido nunca.

Solté una risilla baja a sabiendas de que Jungkook estaba más dormido que despierto en aquellos momentos.

—No, no es un sueño —dije casi en un susurro, devolviéndole la sonrisa—. Lo siento, no quería despertarte.

how i met your father || bts harem fanfic [+18] [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora