Capítulo 22| ¿Quieres ser mi novia?

3.7K 274 30
                                    

Esta noche tenía que ser perfecta. Quería que fuese especial para Alanís. Le pediría oficialmente que sea mi novia, ahora si, no dejaría que nadie, absolutamente nadie se le acerque de ninguna manera. Pondré a Sergi, Erwin o a quién sea que fuere en su lugar. Porque Alanís es mía. Si, tal vez suene un completo machista troglodita pero si de algo estoy seguro es que quiero a esa pequeña como no imaginé jamás.

La veo bajar de las escaleras, lleva puesto un vestido corto color vino donde se puede apreciar su cintura pequeña al igual que ese escote en el frente. No estoy seguro de si podré soportar que las miradas de los hombres se centren en ella. He sido testigo de cómo la observan algunos queriendo comérsela con la mirada, ella ni siquiera se da cuenta de lo que provoca, es tan inocente y eso me vuelve loco. Pues debo confesar que soy un hombre celoso. Muy celoso.

— Estás hermosa Alanís— acaricio la mejilla de mi chica una vez que la tengo cerca, frente a mi. Sin dejar de admirar su belleza.

— Gracias. Tú también te ves bien.

— ¿Sólo bien?— adoro cuando Alanís deja la timidez a un lado sonrojándose y regalándome su hermosa sonrisa.

— Te ves muy, muy bien. Me gustas mucho Cedric.

— Ven aquí pequeña— acerqué aún más a Alanís abrazándola por la cintura, besándola en lo labios para luego alejarme tan solo un poco diciéndole que ella me encantaba— Tú me encantas.

— Debemos irnos o se hará tarde— su voz apenas era un murmullo, no quería separarme de ella pero tenía razón, debía de seguir con lo que tenía planeado para que oficialmente esta noche ella sea mi novia.

Organicé una cena con toques románticos, la verdad era muy tonto con estas cosas, no sabía bien cómo hacerlo. Tuve que dejar de lado mi orgullo y pedir ayuda. Danila, a quién realmente considero una tía, me ha dado algunos consejos para poder realizar de esta noche, una hermosa velada. Llegamos al lugar donde tenía preparado, ayudé a bajar del auto a Alanís, la guíe hasta dentro sin soltar su mano e ingresamos hasta la terraza del restaurante. Si, había pedido una reserva en uno de los restaurantes más importantes del país y lo había pedido en la terraza para impresionar un poco a mi pequeña traviesa. El lugar era exclusivamente nuestro por esta noche.

 El lugar era exclusivamente nuestro por esta noche

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Cedric , esto es....¡precioso!

— Deseo que en verdad te guste todo preciosa. Esta noche es por ti— besé cortamente sus labios para luego ayudarla con la silla. Nos sentamos y comenzaron a servirnos la cena, la noche estaba iniciando muy bien.

Hablábamos de todo un poco, nos conocíamos cada vez más. Ahora Alanís sabía más de mi como yo de ella. Tuvo la confianza de contarme algunos detalles de la infancia que le tocó vivir en manos de ese desgraciado que mató a su tía Kendra. Cuando me narraba lo que había pasado, como ese infeliz las golpeaba, quería tenerlo en frente para molerlo de igual forma y decirle que pagaría por todo el daño que le hizo a Alanís. Aún no puede superar todo eso pero las sesiones con la profesional donde asiste, la están ayudando mucho para vencer todo ese miedo y ser realmente como ella es. Una persona alegre, libre, carismática. Deseo que pueda avanzar cada día y sea completamente feliz. Ella se merece más que nadie.

Mía ©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora