Capítulo 34 | La distracción de Sergi

2.2K 175 22
                                    

Alanís

Cedric aún no se ha animado a hablar con Jessi. Y ella sigue molesta con su madre. No la culpo, la verdad cada uno toma como puede los golpes de la vida. Enterarse que tenía un hermano mayor del cuál nunca supo nada hasta ahora, es muy difícil de asimilar.
Ambos han tenido mi apoyo pero esto no puede continuar así. Debo de hacer algo más por ellos. Debo hacer que se conozcan y se relacionen como los hermanos que son. Además, Jessi está muy ilusionada con poder compartir con su hermano mayor. A Cedric sólo le falta un pequeño empujón para que se dé cuenta de que Jessi no tiene culpa alguna de que ella haya estado siempre con su madre. Pues la culpable en verdad aquí es la señora Gladys por las decisiones que tomó. Aunque en realidad aún no sepamos las razones por las cuales lo hizo.

Hoy intentaré hacer que tanto Jessi como Cedric puedan hablar sin interrupciones. Como hoy debo ir a la empresa de papá antes de irnos al campo con mis abuelos, le pediré a Jessi que me acompañe. Así podré decirle a Cedric que necesito hablar con él pero lo que haré será dejarlos solos. Solo espero que todo salga bien y que Cedric no se moleste conmigo por eso.

*** Un par de horas después...

— Cedric ¿podrías acompañarme un momento a la oficina de papá? ¿por favor?— no estaba muy segura si lo que estaba haciendo era correcto pero tenía que arriesgarme. Por Cedric, por Jessi. No puedo seguir viéndolos tristes por toda esta situación.

— ¿Ocurre algo?— no quería preocupar a Cedric, creo que en la manera en que se lo pedí para ir a la oficina fue un poco apresurada.

— No, no pasa nada. Es solo...un asunto pendiente que no logro entender.

— Está bien, vamos— Cuando salimos de su oficina comencé a ponerme nerviosa ¿y si me odiaba después de esto? Jessi ya lo sabía, es más, ella estaba feliz de poder hablar con Cedric pero... Él, ¿él querrá lo mismo? Antes de ingresar a la oficina tomé de la mano a Cedric pidiéndole disculpas.

— Cedric, por favor discúlpame. Por favor espero no me odies por esto.

— ¿Qué sucede preciosa? Me estás preocupando, ¿Estás bien?

— Si, es que yo...por favor solo prométeme que no te enfadarás conmigo cuando entres allí. Lo hago porque te amo Cedric. Porque los quiero a los dos y no me gusta verlos mal.

— ¿De qué hablas amor?— abrí la puerta de la oficina de papá para que Cedric vea de lo que hablaba. Cuando ingresamos, Jessi se puso de pie inmediatamente mientras que Cedric se quedó completamente estático. No quise ser un estorbo entre ellos, pedí nuevamente disculpas y los dejé solos.

— Espero me disculpes Cedric. Pero esto es lo mejor para ustedes, para ti. Los dejaré solos.

Me fui sin esperar a que digan nada, le había pedido a papá su oficina porque allí nadie los molestaría y él con gusto me lo concedió. Probablemente en estos momentos se encuentra en una reunión con Alessandro. Por lo que me tocará trabajar a solas con Sergi. Con todo lo que he progresado en mis sesiones con la psicóloga, ya no le temo tanto a las personas y últimamente Sergi se ha vuelto alguien a quién podría verlo como un amigo, al igual que los son Erwin y Daniel.

Al llegar frente a la oficina de Sergi tomé una respiración profunda armándome de valor para poder ingresar y comenzar a trabajar. Toco dos veces la puerta, al escuchar un <<pase>> ingreso lentamente a su oficina.

— Buenos días Sergi, yo- — no pude terminar de hablar, inmediatamente Sergi se adelantó saludándome.

— Buenos días Alanís, adelante pasa. Te estaba esperando para iniciar con la evaluación de este proyecto.

Mía ©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora