Sugar Melody | SUGA

28.

Observo con detenimiento la tarjeta que hace unos momentos me entregó, Park. Y leo una y otra vez la dirección escrita en ésta.

¿A qué lugar la llevaría a ella? ¿Realmente no habrá ningún peligro?

Tenía demasiadas dudas en mente y sabía con exactitud qué Park no las resolvería y es ahora donde me comenzaba a convencer a mi mismo de buscar respuestas por mi propia cuenta. Necesitaba saber qué es lo que envolvía a Dulce, que clase de problema la involucraba a ella como víctima.

Debía comenzar a indagar pero simplemente no podía hacerlo aún. Tenía pendientes que resolver con Namjon y la disquera. Ahora más que nunca debía preservar mi empleo en la empresa.

Saco el móvil del bolsillo de mi chaqueta y decidido comienzo a buscar el contacto de Namjoon pero la llamada entrante de Nancy me interrumpe, con esta, ya era la quinta vez en el día buscándome.

—¿Qué mierda quieres? —le respondí al fin.

—¿Dónde has estado? ¿Por qué no me has respondido mis llamadas, Yoongi?

—No te incumbe.

—Ni siquiera has ido a trabajar. ¿Qué es lo que te ocurre?

—No finjas preocupación, Nancy...

—¿Por qué piensas tú que finjo interés hacia ti? —la escuché un tanto molesta— ¿Por qué, Yoongi?

—¿Por qué? Porque eres una maldita interesada, eres una zorra Nancy.

—No me digas eso, Yoongi —la escuché un tanto ofendida—. No tienes por qué hablarme así.

—¿Qué es lo que quieres, Nancy?

—Verte —respondió—. Lo único que quiero es verte.

Pensé mejor las cosas. Ella siempre hacia lo que yo le pedía al final de todo. Admito que en ocasiones me dejaba manipular por el hecho de dejarla destacar en la mayoría de las canciones de su grupo. Pero ella era una mujer estúpida, con un simple comentario yo podría hacerla destacar en cada canción del grupo e incluso volverla solista. Aunque me cueste admitirlo, reconozco el talento cuando lo veo y ella tenía talento, es una lastima que ella piense que no lo merece y tenga que darme sus motivos para destacar.

Conocí a esta mujer en el mismo tiempo en que Dulce se convertía en la mujer de mi vida. Nancy había llegado a la empresa como trainer y debo de admitir que en desde un inicio llamó de mi atención, era una mujer bella pero ambiciosa con lo material y lo supe cuando aquella vez primera,entro a mi oficina intentando ganarse más que unas simples líneas en la canción debut. Y es que en ambos se sentía la atracción, no podía negarlo, y fui un imbécil por dejarme llevar en aquel malicioso juego de Nancy.

entro a mi oficina intentando ganarse más que unas simples líneas en la canción debut. Y es que en ambos se sentía la atracción, no podía negarlo, y fui un imbécil por dejarme llevar en aquel malicioso juego de Nancy.

Nancy sabía mis sentimientos hacia Dulce pero eso no le importaba y siempre me volvía débil. Debo de admitir que me siento la peor mierda del mundo por haber hecho eso sin saber las consecuencias.

Aquella noche del accidente de Dulce, ambos habíamos enloquecido al punto de enviarnos directo a la mierda, y por puro recelo y enfado; ella se fue con Taehyung y yo decidí hacer lo mismo yendo a Nancy. Fui un estúpidl porque le di la importancia que no merecía a Nancy y desde ese día mi vida se tornó una total mierda.

—Yo simplemente no quiero verte —respondí—. No me molestes, Nancy.

Y finalicé la llamada dejándome de lado tanto drama.

•••

—¿Cómo te sientes? —pregunté a Dulce estando en su habitación del hospital.

Ella comía su cena con tranquilidad, ahora mismo comía la gelatina con cierto nerviosismo y no pude evitar no hablar de ello.

—¿Qué sucede? —pregunté.

—Nada, Yoongi —respondió observándome—. Es sólo que —pausó y observó hacia la puerta— ¿Dónde está Jimin?

Sentí como esa pregunta me llegaba de alguna forma. ¿Acaso ella no disfrutaba de mi presencia?

—Él se ha ido, me ha pedido estar contigo hoy y todo el día de mañana —le respondí y observé cómo su expresión cambió.

—Quiero irme a casa —dice de repente.

Le regalo una sonrisa improvisada y desciendo mi cabeza observando mis manos, con la única intención de evitar hablar acerca del pasado. Debía mantener mi palabra.

—¿Sigue en pie el trabajar juntos? —le pregunto con la intención de cambiar de tema.

—Aún continua en pie —responde.

Jugueteo con mis manos nervioso y después suelto un pesado suspiro. Decido observarla nuevamente y ver su rostro con aquellas marcas me trae tan amargos recuerdos del imbécil que fui.

—Quiero empezar a trabajar juntos lo antes posible —dije con sinceridad y ella lo notó, me observó y asintió con timidez.

—¿Crees que no haya ningún inconveniente? —pregunta.

—No creo que exista alguno.

—Excepto que Jimin no me dejará trabajar contigo —dijo con cierto tono de melancolía.

—Pero él no tiene por qué saberlo, Dulce —le sonrío y ella me observa pensante—. Tú quieres poder ser independiente, ¿No es así? —ella asiente— Entonces puedes comenzar a hacerlo haciendo algo que te gusta y eso es el componer canciones.

—Realmente no considero que llegue a ser muy buena.

Me causó cierta ternura a la par de tristeza, es una pena que ella no logre saber todo lo que fue en un pasado.

—Créeme, Dulce. Tú eres una excelente compositora. Tan sólo, cree en ti. 

Pido disculpas si me demoré en publicarlo, no pude terminarlo a tiempo pero como siempre aquí andamos <3 Las quiero <3