No más

Capítulo XIV

Ahí estaba otra vez esa sensación de que todo estaba mal, quería saber que podría estar pasando pero el fuego sagrado no mostraba nada. La puerta de atrás se abrió y vio a Makoto entrar en silencio.

-Desapareció Mamoru. -Fue un susurro pero logró captar el mensaje rápido.

-Saben algo? -Volteo le dio la cara a su amiga. Estos días sus sentidos se sentían alerta como si fuera a ser atacada, pero al parecer el objetivo era otro.

-Endimyon fue corrompido.

-Quienes lo saben?

-Las exteriores y nosotras dos. No quieren preocupar a Usagi.

Reí empezó a meditar que tanta repercusión tendría en Usagi la información y sabia que ella era bondadosa y de un corazón grande. Pronto escucho a Nicolás entrar, al subir la mirada quiso verlo a los ojos y solo noto que este miraba a si amiga con una sonrisa.

-Gracias Nicolás. -La castaña devolvió el gesto.

-Saludos a Motoki. -Decía mientras salia del lugar.

-Conoce a Motoki? -No sabia que fuera posible.

-No lo recuerdas? Una vez salimos todos y con nuestras parejas. Bueno ahora que lo recuerdo, tu no llegaste, dijo Nicolás que estabas en una reunión muy importante con tu padre. Pero todos se conocieron.

Otra cosa que podría reprocharse, como podía ser tan cruel con una persona tan buena.

-Tenemos que decirle a Usagi lo que pasa.  Debemos de estar preparados para un ataque. -Evadiendo el tema y lista para hacer la llamada fue interrumpida por su amiga.

-Iré, será mejor estar ahí y dar el apoyo.

-Hace cuanto que desapareció?

-Dos días.

-Los mismos sin ataques. Debemos movernos

-Si. Vamos las dos o solo yo?

-Ve tú. Tengo algo que hacer.

-Esta bien. -Makoto salio dejando a la sacerdotisa con su mente llena de dilemas.

-Rei? -Nicolás estaba en la entrada y la chica lo miro.

-Qué pasa?

-Es lo que yo te pregunto. Makoto vino aquí por que te necesita, por que la dejaste ir sola.

-No sabes que pasa. -No quiso que se escuchará tan fuerte su comentario pero no puso evitarlo, el joven bajo la mirada de nuevo.

-Nunca sé que pasa, solo que ustedes son más de lo que aparentan. Nunca dices nada ni compartes algo conmigo pero siempre te observó Rei. Te necesitan, las cosas extrañas vuelven a Tokio y ustedes siempre están ahí, no necesito ser un genio para unir cabos.

-Nicolás...

-Nuestro compromiso fue por que tu abuelo pensó que era lo mejor, que el templo quedaría bien, al parecer eso te hizo más distante con todos, te dejo libre. Ve y cumple tu destino.