•Capítulo 23•

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Estoy en el segundo mes de embarazo.
Tengo la panza como si estuviera de 6 meses.
Hoy vamos a ir a comprar cosas con William para el bebé, supongo que va a ser un dia normal, como personas normales.

-¿Ya esta lista mi hermosa luna?.- dice William tomando las llaves del auto y mirandome con carita tierna.

-Ya estoy lista mi amor. - dije regalandole una sonrisa.

-¡¿PODEMOS IR?!.- gritan dos voces femeninas saliendo de la cocina.

-No, Lexi.- dice William.

-Hermanito, yo te quiero mucho ¿sabias?.- dice Alexa.

-Ya lo se, pero igual.

-William, yo seré su tía, tengo derecho a ir a comprarle algo si quiero.- dice Ale.

-Yo también seré su tía.- agrega Maylen.

-No irán.

Salimos rumbo al centro.

-Este es hermoso, ¿lo podemos llevar, lo podemos llevar, lo podemos llevar?.- dice Alexa tomando una pequeña prenda de color celeste.

Si, la insistencia de Alexa y Maylen lograron que William aceptara.

-Es una pesada, definitivamente tendríamos que haberla dejado en casa.- me susurra William.

-Escuché. - dice Alexa y lo fulmina con la mirada desde la otra punta de la tienda.

La mañana se basó en eso, conprar ropa unisex, no sabemos que sexo es aún, compramos una cuna de color blanca. Y ahora vamos de nuevo en viaje hacia la manada.

-Elias ven, ayudame con la cuna.- dice William saliendo hacia afuera .

Bajaron un monton de cajas, y adentro las tablas de madera, hay que armarla mas tarde.
Paso el resto de la tarde, y era un día normal, como gente normal.

-¿Será un varonsito?.- dice William abrazandome mientras veiamos tele en la sala.

-No lo se, pero quiero que sea sorpresa.- le dije y me acurruque en su cuello, sintiendo su exquisito aroma.

-Pero...

-¿Pero...?

-Si no sabemos como le compraremos cosas.

-Le compramos cosas unisex hasta el momento.- dije no dandole mucha importancia. El no está muy convencido.

-Pero... yo quiero saber.- dice haciendo puchero.

-Ush, caprichoso.- dije y regalándole una sonrisa.

Llego la hora de armar la cuna.

-¡Aaah!.- grita Elias de dolor. Se martillo un clavo en el dedo, se lo sacó y enseguida comenzó a curar.

Estos "hombres" son mas inútiles. Seres sobrenaturales, porfavor... y no pueden armar una simple cuna.
Bueno, no tan simple.

¿Es simple?

Claro que lo es.
Es muy fácil.

Pero el "macho" Alpha es necio y no quiere recibir instrucciones de los demas y hacerlo a su manera.

Pero gracias a su terquedad le pego con el martillo al dedo de Elías.

-¿Con que hombres, verdad?.- le susurre a las chicas.

-¿Cin qui himbris, virdid?.- dice William tratando de imitar mi voz, y no lo logró, pero... si logro conseguir que me enoje. YO NO HABLO ASI.

-¡Yo no hablo asi!.- dije.

Mío, Solo Mío. [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora