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había estado todo el día en el set, al borde de un colapso nervioso o tal vez sólo demaciado ansioso por todo lo que estaba ocurriendo en su vida, o más bien todo lo que su mente y emociones le estaban haciendo pasar.

o tal vez..

lo que cierto chico le estaba haciendo sentir, aunque sentir es una palabra demaciado amplia, pues el no sabía nisiquiera si es que sentia algo por el.

la mente de noah era un pequeño laberinto sin salida que daba vueltas en todo lo que estaba ocurriendo y terminaba llegando siempre al mismo punto.

por un segundo decidió que no era tiempo para estar pensando o terminaría en un manicomio, el día actual había terminado en el set, y ya les tenían permitido ir a sus hogares,  noah no era la excepción, quería  ir a su casa enterarse en su cama y dejar de lado todo pensamiento que involucrara los ojos cafés y esas pecas.

que lastima que al parecer nada nunca sale como noah quiere que salga.

justo cuando caminaba a la libertad de la salida en dirección al auto que lo llevaría lejos, ya saboreando el dulce sabor de sentirse sin presión alguna. su cadera fue sostenida impidiendo rigurosamente avanzar a sus piernas y a su propio ser en si.

- tienes que venir conmigo- le sorprendió quien más y quien menos que su novio le había atrapado intentando huir del encierro.

- quiero irme a mi casa- quiso soltar el agarre pero sólo logró que este se hiciera aún más bruto y que le pegara al cuerpo del contrario, quedó rígido de los nervios, cosa que no le había pasado antes pero debía disimular.
-sueltame quieres?-

-no quiero- logró que ambos se miraran un poco aunque los ojos verdes trataban de evitar a los cafés en todo lo que podía lograr.- por que no me miras? - inquirió en un susurro, ambos estaban casi solos ahí pues todos se iban de a poco a sus hogares.

-....- simplemente no sabía como responder, no sabía por que no quería mirarlo ni tampoco por que esa situación que nunca le había causado nada, ahora le ponía los pelos de punta.

-vamos a mi casa- casi ordenó tratando de cambiar el tema.

- no quiero ir a ver películas!- gritó de un salto olvidando todo el nerviosismo que sentia para soltar el comentario que hizo al risado reír en respuesta.

- no vamos a ir a ver películas- comprendiendo el otro sentido de la acción sólo avanzó unos pasos tratando de que noah le siguiera.- vamos, sube a mi auto, te cuento en el camino.-

- así le dijeron a mi tía y ahora estoy lleno de primos...-

y sin poder decir otra cosa cuando ya no se había dado cuenta, estaba en el cómodo asiento del copiloto, en el gran auto negro de finn, auto por el cual se sorprendió preguntandoce mucho tiempo atrás  como sería dentro.

el camino se mantuvo en silencio por los primeros minutos donde ninguno de los dos dijo ni una palabra y cada quien se limitaba a mirar por atraves de un vidrio, el el caso de finn el para brisas y en el caso de noah, la ventana a su derecha.

más de una vez los ojos cafés miraban al  menor buscando respuestas de su comportamiento.

¿será que lo de los mensajes le había afectado demaciado? pero si el se había encargado de aquello con esas historias, ¿que podía ir andando mal?.

finn era muy torpe para notar lo que estaba causando.

- a donde vamos entonces?, me estas secuestrando. - sin dejar de mirar la ventana no aguantó más la duda de su siguiente paradero.

Novios Frente a Cámara (Foah) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora