Fiesta 2

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Narra Poché

Definitivamente este no era mi juego. Había perdido la cuenta de las veces que había fallado al tirar la bola. Los primeros tragos me supieron muy mal. Me ardía la garganta y sentía muchas ganas de vomitar. Habíamos tomado tanto, que Camilo y Felipe estaban un poco borrachos ya. Yo estaba empezando a sentirme mareada. Por suerte, ellos dos tenían una puntería grandiosa, por lo cual, Calle, Santiago, Sara y Ana también estaban un poco tomados.

- Bueno Poche, yo pensé que eras mejor en este juego. Ya estoy bastante tomado. - me dijo Camilo mientras estaba sentado en la mesa del trago- yo creía que no querías emborracharte - le pegué una palmada y el solo se rió.

- Lo bueno de todo esto es que tomaste por cuenta propia Maria. ¿Jugamos otra ronda? - sugirió Felipe y al pensar en tomar más casi vómito. Él me miró y sonrió- ya lo suponía. Chicos, hemos acabado el juego.

- Hemos ganado nosotros. Ustedes tres están muy borrachos. Calle y yo en cambio, estamos como si nada. Sara y Ana estaban así desde antes - dijo Santiago- ¿cual es el premio?

- ¿Que mas que ver a Poche borracha? Ya solo con eso me considero victorioso aunque perdí - dijo Camilo.

- Bueno, la gracia es que nosotros los ganadores obtengamos algo... Amor, ¿que se te ocurre? -  le preguntó Santiago a Calle.

Había estado callada durante casi todo el juego y por lo general, siempre intervenía cuando Camilo y yo discutíamos. Ahora, solo nos miraba fijamente y parecía estar pensando en algo.

- La verdad, yo solo quería que poche se emborrachara...

- Yo tengo una idea - dijo Ana muy emocionada- los tres deben ser buenos bailarines, así que - sonaba Havana de Camila Cabello en ese momento- bailen esto para nosotros.

Todos asintieron emocionados y sentí que el trago se subía más a mi cabeza. ¿bailar para ellos? Ana era extrovertida, pero no pensé que propusiera algo así. Camilo y Felipe no parecían contrariados por la idea y se pararon. Camilo me miró y me dijo:

- Ven pequeña, un trago más y verás como esto queda en nada. Hoy estamos para gozar.

Narra Calle

Habíamos estado jugando alrededor de 15 minutos y ya Poche estaba muy borracha, porque tenia muy poca puntería. A Camilo no le importaba al parecer que estuviera tan cerca con Felipe y que la tratase como si la conociera hace mucho, así que me relaje. Era libre de hacer lo que quería. Cuando Ana les propuso bailar para nosotros, Poche se negó rotundamente, pero luego de unos tragos más, la idea le pareció mucho menos descabellada.

- Vamos poche, no lo pienses más - insistía Ana.

- Es que... No creo.. Que sea buena idea...

- Lo va a ser, vas a ver hermosa.

Sentí como me iba poniendo caliente, luego de que Felipe la cogiera de la mano y la parara frente a nosotros. Con el ritmo de Havana, Felipe empezó a bailar lentamente y Sara y Ana enloquecieron. Tenia que admitir que bailaba bien. Camilo se paró y empezó a bailar también junto a ellos y Ana aplaudió por sus movimientos.

- Vamos poche - le dijo Camilo.

Y esta vez, acepto. Empezó a bailar al ritmo de la canción. Sus caderas se balanceaban perfectamente. Sus manos y hombros adornaban sus movimientos, mientras pasaba sus dedos ya fuera por su cabello o por su cintura. Su pecho completaba la escena perfecta. Era un baile muy sensual y la hacia ver aún más hermosa. Ana se emocionó muchísimo y salió a bailar con Camilo. Los dos bailaban muy pegados. Un chico de la mesa cercana se paró y sacó a bailar a Sara.

Y de un momento a otro, pasó. Felipe se acercó por detrás a Poche y empezaron a bailar muy sensual. El respondía a los movimientos de cadera de ella y cogió sus manos para estar aún mas cerca. Estuvieron bailando así un poco de tiempo y finalmente, el hizo que se girara y la pego a su cuerpo. En este momento, me sentía extraña. El trago seguramente estaba en mi cabeza, porque ver esa escena mareaba. Sentí como unas manos me sujetaron por detrás y luego unos labios en mi cuello.

- Ven preciosa, bailemos - era Santiago.

Empezamos a bailar y nos acercamos accidentalmente al lugar donde bailaban felipe y poche. Cada vez estaban más cerca y ella lo miraba con una cara extraña. Hay que admitir que Felipe era guapo, pero seguramente lo favorecía el hecho de que poche hubiera tomado.

Pasaron algunas canciones y las parejas seguían igual. Camilo y Ana estaban felices. Se había olvidado de Poche. Y preguntándome que sería de ellos dos en este momento, vi algo que no me esperaba. Felipe cogió la cara de ella y la besó. Sentí que me congelaba y choqué con Santiago que en ese momento quería que caminaramos un poco hacia atrás

- ¿que pasa amor?

- Nada... Es solo que no me siento del todo bien.

- ¿Quieres un vaso de agua? - no podía quitar los ojos de esa escena- esperame acá.

Santiago se alejó y me quede parada en ese sitio. Poche estaba borracha, no va a acordarse de nada mañana. Si Camilo no se preocupaba, yo lo haría. Me fui acercando y ellos seguían muy cerca. Cuando estuve atrás, les dije:

- Bueno chicos, creo que Poche está muy borracha. Es hora de ir a casa - eran más o menos las 12 de la noche. Felipe me miró y sonrió.

- Oye, pero apenas empieza la fiesta.

- Si... Yo estoy bien... - poche me miró mientras sonreía. Trato de moverse y se tambaleó. Camilo escuchó lo que hablábamos y dijo

- Bueno pequeña, creo que Calle tiene razón. Es hora de que vayas y descanses. - le Sonreí y me dirigí a poche.

- Ven, vamos ya - ella trató de resistirse y por ultimo miró a felipe.

- Bueno, se acabo la fiesta. - el le sonrió.

- Aún no, sé donde estudias, nos veremos por ahí - esto me molestó y me despedí de todos y me dirigí con poche a esperar un taxi. Cuando estuvimos arriba me dijo

- Calle... No puedo llegar así a mi casa...

- No había pensado en eso. Hoy dormiras en mi casa.

Mi decisión - CachéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora