Papeles invertidos

Capitulo 6: Disculpa del idiota.

Despues de dos horas de charla con Alex volví al cuarto.

- ¿Como ha ido eso? -gritó desde el baño Stef.

- Bien! -grité para que me escuche- Nos estamos haciendo muy buenos amigos.

Y era verdad, Alex era mi primer amigo de distinto sexo. Y lamentablemente era terriblemente sexy.

Cuando Stef salió de bañarse nos fuimos a la cafeteria, era la hora de cenar.

Cuando entramos todas las miradas se posaron en mí, literal. Hacia menos de una semana que habia llegado pero todavia seguia siendo la rara chica nueva que habia provocado al chico popular en frente de todo el instituto.

Me deben considerar una puta.

Pedimos la comida y la verdad no estaba tan mala.Me imaginaba algo asqueroso, pero me sorprendí al poder digerir la comida.

Cuando voy a dejar la bandeja con lo que sobró de lo que comí me choco con alguien y la bandeja se pega junto con toda la comida a mi blusa.

- ¿QUE NO PUEDES PRESTAR MÁS ATENCION? -grito molesta mientras observo mi blusa ahora con fideos y salsa.

- Uy, lo siento. -me dice una voz femenina y chillona, levanto la vista y es Zara, todo en mi contra siempre- Ha sido sin querer -su voz suena tan falsa y lo peor es que lo hace aproposito

- ¿Que quieres? -hay que ir directo al grano.

- No te acerques mas a Chad, es mio, es mi novio no tuyo -estuve a punto de reirme a carcajadas y atragantarme con mi propia saliva pero me contuve.

- Primero de todo a mí me hablas bien, yo no soy otra de tus perritas falderas que obedecen a todo lo que les dices -miro a las 5 chicas detras de ella que miran a otro lado, incomodas- Segundo, yo no busco nada con Chad Dylan, es un idiota, solo compartimos una clase y en todo caso esta escenita hacecela a tu "novio" el otro dia estaba semidesnudo en mi ducha..

Y con eso me dí la vuelta hacia mi habitacion. No habia notado que estabamos discutiendo y todos en la maldita cafeteria nos estaban escuchando. Ella quedó ridícula, me da pena, su supuesto novio se acostaba con cada ser con vagina.

Me cambié y me quedé en la habitacion mirando tele, ya no me daba tiempo de ir por el postre.

Tocaron la puerta y con un bufido me levanté a abrirla, seguro Jaz habia regresado de su cita y no tenia la llave.

No, no era Jaz ni Stef, era Chad. Este chico es un grano en el culo.

- ¿Qué mierda quieres, Dylan? -lo miré mal y me sonrió como siempre, arrogante.

- Calmen al toro que está furioso -dijo dramaticamente.

- Acaso ¿Me acabas de llamar toro?

- Era una manera de decir...

Lo interrumpí. - Dime que quieres, no tengo tiempo.

- Solo venía a disculparme por lo de la cafetería, Zara es un poco celosa -reí.

- ¿Un poco? -asintió incomodo- ¿Acaso sabe que todos los dias estas con una chica distinta? Y de seguro que haz estado con una de sus perras falderas.

- ¿Perras falderas? -rió y me enojé.

- Si, ¿no las haz visto? Son unas zorras que practicamente son iguales a tí, estan con un chico diferente, solo que ellas son las que despues son desechadas. Y van atras de Zara como perras falderas.

Rió con una carcajada y me miró.

- Ya, ahora ¿Algo más? -le pregunté mal.

- No nada más -se dió la vuelta pero despues se detuvo- Si, algo más -se acercó y me besó. Yo le correspondí el beso, me aerepentiría luego pero no pude apartarme. De repente se alejó y yo quedé parada como una idiota en la puerta.

Cuando me doy la vuelta, la puerta está cerrda. Oh no. La puerta se abre solo de adentro a no ser que tengas la llave. ¿Adivinen qué? Yo no la tengo.

Estoy segurisima de que no la cerré... OOOH ha sido el idiota de Chad, me besó para cerrarme la puerta y dejarme afuera.

- MALDITO IMBECIL -grité, pero el ya se habia ido.

Ahora tenía que esperar que alguna de mis compañeras se digne a aparecer. Me senté contra la puerta, no podrian tardar tanto, ellas vuelven de la cafetería, deben estar comiendo postre, que yo por la culpa de la zorr...Zara no pude ni probar.

¿Por qué le correspondí el beso? Que ¿Acaso soy tan idiota como para romper otro corazón? No, no y no. Claro que no, James, Chad no se está enamorando de tí.

Habian pasado solo unos veinte minutos y ya me habia aburrido. Si seguía asi de sola en el medio de un pasillo iba a terminar contando cada ladrillo de este edificio como en mi serie favorita The Vampire Diares. Aunque no estoy obligada a ello, y menos por un lazo señorial. Ojalá tuviera un Damon aqui para protegerme exesivamente de las zorras, un Stefan que este siempre, una amiga como Caroline. Y ya me fui del tema.

- ¿Se puede saber que rayos haces en el medio del pasillo? Llamé a tu telefono como seis veces, ya pensé que andabas mostrandole nuestra ducha a otro chico en boxers. -Stef dijo divertida, mientras con un tremendo dolor de espalda me levanté.

- Que graciosa, seguro que te apresuraste por eso, para ver a otro sex symbol en boxers.. -dije media adormilada.

- Dos cosas: Primero de todo, obviamente, no me quejaría ver a un Alex en boxers y mojado. -hizo un gesto mientras sacaba su lengua. Reí y ella buscó sus llaves en el bolso- Y segundo y no menos importante ¿Acabas de admitir que "el idiota" de Chad es un sex symbol?

Mi sonrisa se fue de inmediato.

- No.. osea no, yo..

- Dejalo ahí, porque tú -me apunto con el dedo indice y cara juguetona- te vas a enamorar de él.