Inestable [FrandralxLoki]

❃Epílogo

— Ha sido una decisión muy madura de tu parte, Loki —Odín acompañó los pasos de su hijo hacia la puerta.

— Sólo cumplo tus órdenes.

— Pero bien estás en posición de negarlas.

— Jotunheim no me aterra ni me ha de causar curiosidad. A menos que fuera un niño, no veo razón para no cumplir una simple tarea —contestó con firmeza Loki.

Odín asintió con solemnidad, rodeando con su brazo los hombros de su hijo.

El azabache cesó sus pasos ante al acercamiento. Odín no era muy afectuoso con él, cosa que le extrañó.

— O tal vez para aprender una lección —eso fue lo que pronunció Padre de todo antes de inducir a Loki al sueño. Mantuvo su agarre firme, evitando que éste desvaneciera en dirección al suelo.

— ¿Estás seguro de que esto es lo mejor? —inquirió Frigga, quien descansaba sentada a un lado de cama de Loki, acariciando unos mechones de su oscuro cabello.

— Tú hijo se ha escondido de mi mirada, de la mirada de Heimdall. Puede ser un príncipe, pero eso no amerita suficiente justificación para imponerle un castigo —habló Odín, quien miraba sereno por el balcón.

— Tenía sus razones.

— Y somos su familia, Frigga —Odín se giró hacia su amada—. No tiene porque esconder su vida de nosotros. No puede. Es mi hijo, y por ello, le abriré la conciencia mediante el sueño.

La reina sonrió con suavidad, regresando su meliflua mirada al azabache. En esta ocasión tomó su mano, confiando en que una vez que Loki despierte las cosas dejarían de ser un secreto.

~•~

Loki abrió los ojos, no como un despertar suave, sino con la impresión de haber salido de una mala experiencia. Ahí estaba en su habitación, cansado, con el peso de la incertidumbre. Sentía haber dormido un día entero y eso no era característico de él.

Sin cambiar sus ropaje de dormir, Loki salió de la cama y de su aposento, encontrándose pronto paseando por los pasillos. No había nada fuera de lo usual, la vida seguía en el palacio, y casi podía adivinar que sus padres se encontraban tomando la cena en el comedor real, así que sin destino previsto, se dirigió hacia allá.

Abrió la puerta con sigilo, deteniéndose a mirar en el entresijo al notar otras voces dentro además de las de los reyes. Ahí estaba Thor, Fandral, ambos sonriendo y bebiendo hidromiel en un pequeño festín. Loki sonrió, feliz de verlos de vuelta en Asgard tan rápido. Aunque titubeó al momento de decidir entrar. Con su familia no habría problema, pero casi podría jurar que Thor le reprendería por salir con esas prendas en presencia del guerrero. Sin tan sólo supieran lo qué pasa en realidad...

Empujó la puerta con suavidad para anunciar su presencia, siendo la atención posada sobre él inmediatamente. Loki buscó cobijo en la mirada de Fandral, y éste le miró con extraña ternura, con una sonrisa que contenía el añoro de verlo.

— Loki —pronunció Odín—. Has despertado.

— Así parece. Creo que... —se detuvo, examinando la situación. Poco a poco recuperaba la memoria. ¿Y Jotunheim? Fandral y Thor estaban de vuelta, ¿habían pasado ya semanas? Una sonrisa incrédula se le escapó de sus labios, no dejando a discreción su sorpresa—. ¿Qué pasó? Tan rápido volvieron de Vanaheim.

— Siéntate, hijo mío. Te estábamos esperando.

En consuelo en la mirada de Frigga y la expresión relajada de Thor le brindó la certeza de tomar el asunto con calma.

~•~

— Fue tan real —susurró Loki.

— Yo metí esas imágenes en tu mente, Loki. No hallaba forma más serena de hacerte reflexionar sobre la situación.

— No me escondía para hacer algún mal. Yo...

— Sólo querías mantener tu relación con Fandral en secreto —intervino Thor.

Loki tragó saliva, llevando la mirada abajo. Ya no había salida, ya se había descubierto todo.

— Y me enoja bastante —prosiguió el dios del trueno, con entonación elevada esta vez, haciendo sobresaltar a Loki levemente. Ya veía que Thor se había estado conteniendo todo este tiempo; seguro no lo aceptaría—. No me dijiste tú mismo y eso me enoja. Podías confiar en mi, hermano —ahora su voz era más tenue, como dolida, pero sin rencor alguno hacia Loki.

El dios del engaño se quedó sin palabras.

— Pensé que te inspirábamos la suficiente confianza para contar con el nosotros —habló Odín—. Así como Thor, tú tienes tus libertades. No creo que ganes mi desaprobación con tu amorío con este guerrero.

— Lo siento, si lo que quieren es que no vuelva a esconder cosas entonces mejoraré en ello, pero saben que me es indispensable el enigma de mi persona —dijo vencido. Ahora veía que el verdadero castigo era avergonzarlo con esa charla 'familiar'—. Pero... ¿como te diste cuenta?

Odín le dirigió su mirada a Frigga, concediéndole la palabra.

— Loki, ni tu padre ni Heimdall podían ver más allá de lo que hacías cuando desaparecías de su mirada. No obstante, Heimdall es más sensitivo, y la pequeña vida que crece en ti no pudo escapar de su visión. Así nos pusimos a indagar y nos dimos cuenta de todo.

Los ojos de Loki se abrieron como platos ante la impresión.

— ¿No era parte del sueño? —inquirió de inmediato.

Seguía sin poder discernir de lo que Odín le había mostrado y la realidad de ahora.

— No, hermano. Me vas a hacer tío, y no me pone muy feliz porque justamente Fandral es el padre —bromeó Thor, dandole un ligero golpe en el hombro al rubio.

Loki miró a todos, con los ojos humedecidos. De la pesadilla a la realidad, todo pintaba mucho mejor.

— No lo puedo creer —susurró, realmente conmocionado.

— No puedo esperar para iniciar la planeación de la boda —complementó Odín para cambiar el aire de la conversación.

— Me parece bien. Quiero olvidar mi boda con Thor —comentó entre risas Loki, sintiéndose más ligero ahora.

— ¿En serio hiciste eso, Padre? —inquirió Thor desconcertado ante la idea. Debió de ser duro de asimilar ese sueño.

— Bueno, internamente, fantaseé con la idea de que ustedes dos terminaran juntos, ya saben, con eso de que realmente no son hermanos. Podrían unir dos reinos, para bien o para mal, sin embargo, finalmente el corazón de Loki dictó nuestro destino.

— ¡Padre, no! —Thor se quedó traumado ante la idea de casarse con su hermano.

Todos compartieron risas, encontrando Fandral su mirada con la de Loki en el momento de diversión. Y sólo ahí, supo la dicha de compartir su amor.