Lista De Misterios

Paseo

JACK

Hoy por la mañana mi padre tuvo que salir de urgencia, así que me ha llevado antes a la escuela, está cerrada. He decidido dar una vuelta a expensas de perderme.

Las cosas de aquí se me hacen tan familiares, como si ya hubiera estado aquí antes, mi padre ha llegado a mencionar la idea de quedarnos y entre comentarios a dado entender que ya habíamos vivido aquí... me he tomado la tarea de investigar, un punto más.

Lista de Misterios:
1. Mad
2. Última planta del edificio✔
3. ¿Por qué esta ciudad saca mis "primeras veces"?
4. Mi papá
5. Mi infancia

He resaltado el punto número tres, ya que la lista de primeras veces se ha agrandado:

1. Mis primeros amigos.
2. Mi primer contacto cariñoso con personas externas.
3. La primera vez que mi padre externa lo que siente y piensa.
4. Mi primer pelea.
5. Mi primer beso.
6. Mi primer novia (y quisiera que la única, aunque mi papá me dijo que soy un adolescente que le falta mucho por vivir)

Mad no es la chica perfecta, alta de cuerpo esbelto y escultural, de esas que salen en series. Pero me gusta, su cara es tierna, sus mejillas se ponen rojas cuando hace calor y también cuando se apena, su cabello no es tan largo, casi siempre lo lleva en una coleta, su piel es morenita ya que se ha bronceado por el sol, casi no sonrie, su labios son pequeños y suaves; lo suficiente bajita para que su cabeza llegue a mi pecho y escuche mi corazón... Creo que he divagado un buen rato, tanto que ya no se donde estoy, rayos.

Observo lo que me rodea para saber que puede ayudarme. Casas, casas y más casas.

Cuando era pequeño mi papá decía que si me perdía, no me moviera de ahí y él volvería por mi, pero - ¡Claro! mi padre no sabe que estoy aquí-, ¿cómo carajos regresaré a la escuela?.

Observo algunos jardines, sale una viejesita de una casa azul pequeña, y detrás de ella una bola de pelos muy tierna.

Me observa detenidamente. Lo cual es preocupante, sin embargo tampoco me permito irme.

- ¿Hola?- Le digo dudoso de mi acto.

-¿Eres tu pequeño Jack?- Creo que mi cara de duda se nota a leguas, ya que se acerco a mi.

-¿Cómo sabe mi nombre?

-Soy yo cariño, tu tía abuela Katerina ¿cuándo volviste? ¿Lidia está en casa?

- ¿Mamá? No, ella no esta conmigo- Todo es tan difuso en mi mente, intento recordar, pero no puedo.

- Oh, cariño, no me recuerdas ¿cierto?- Asiento y ella se acerca aun más.- Bueno, después tendremos tiempo para hablar, ¿vas ahora al colegio?

- Si, pero yo puedo ir solo, gracias- Ella solo me ve con tristeza, y se despide de mi, mientras comienzo a caminar...

- Hola, cariño ¿perdido?- Escucho una voz femenina proviniente de un auto.

- Hola profesora, al parecer si, un poco.

- Ven, sube- Hace un ademán y abre la puerta del auto.- y bien ¿qué haces por aquí?

- Pues... quise dar una vuelta por mi cuenta, y resulto mal, al perderme en mis pensamientos, me perdí de verdad.

- Ay, querido. Bueno, suena bien, eso de dar paseos, sin embargo, por ahora sigue con la compañía de alguien.

-Claro, gracias por traerme profesora.

Ambos bajamos del auto, no se que habría hecho si la maestra Raquel no hubiera pasado por ahí de casualidad.