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Predicciones

JACK

No había venido al mercado de la ciudad, mi padre usualmente compra las cosas o manda a su secretaria y después las trae a casa. Es un lugar lleno de gente, puestos por aquí y otros allá, de carne, lácteos, frutas y verduras. Por momentos me pierdo observando mi alrededor, Mad me sonríe al ver lo perdido que estoy admirando el lugar, mis brazos comienzan a cansarse un poco, creo que cargo dos kilos de platanos, uno de manzana y otro más de guayabas. Si la vida me regalara la oportunidad de hacer esto con mi madre tal vez aceptaría, pues nadie se da cuenta que un simple acto te llena de felicidad, lo valioso de pasar los minutos y hasta horas escogiendo frutas, reír y escuchar anécdotas. Apreciar las pequeñas cosas.

- Vamos, Jack. Iremos por un helado.

Las sigo, me pierdo observando aun un puesto donde hay una pequeña figurilla de la muerte, huele a incienso y un señor se acerca a mi.

- ¿Algo que busques jovencito? Una loción para alejar los malos espiritus...

- No, nada, gracias.

- ¡Ya se!, quieres que vea tu futuro- dejo de caminar ¿Es eso posible? Me esta queriendo engañar.

- Se lo que piensas, no soy un estafador, y para que lo notes te daré esta consulta gratis...- toca su sien y cierra los ojos. Una imagen comica parecido a un dibujo animado- Eres muy afortunado la vida te llena de dádivas,- Hace un gran ademán con la manos- vienen muchos cambios, llegará alguien que desearás no recibir.- Ahora pone la manos enfrente como si detuviera algo- Veo una desgracia, se ve borrosa. Un hombre necesitara tu ayuda y también una niña, tendrás que dejar ir a alguno...- Termina con una gran inhalación y después con la boca hace un ruido raro.

Me quedo expectante, tiene razón en algunas cosas, con franqueza tengo miedo y puedo huir, ya.

》Puedes irte jovencito, tu novia espera y se preocupara sino llegas.

- Gracias, señor...- Dudoso me alejo del establecimiento.

- Anda, ve, nos volveremos a ver.

Llego un poco desorientado por el suceso. Miro a Mad observando unas flores, no me límito a acercarme y pedir unas, aprovecharé el dinero que papá deposito pero que no quieren que ocupe.

- Me puede dar dos por favor.

- Claro, jovencito- Tapo los oidos de Mad, la alejo, regreso a pagar y por ellas.
》Unas para ti y unas para usted.

- Cariño, no te hubieras molestado.

- Señora Elena, ustedes se han tomado demasiadas molestías para conmigo así que esto solo es un poco de todo el agradecimiento.

- Gracias, pequeño.

II

La tarde continuo de lo mejor, cocinamos juntos, comimos y después Mad decidío que dieramos una caminata por el vecindario.

- ¿Cómo sigues del estómago?- Me pregunta la pequeña chica.

- Mejor, solo fue la rápida ingésta de alcohol lo que lo provocó, y por si a caso lo google.

- Esta bien- De nuevo el silencio se hace presente pero en Mad y yo, el silencio es cómodo. Podemos solo voltear de vez cuando, sonreír y seguir caminando.

- Hoy un brujo o algo parecido, se acerco a mi y me dijo cosas raras...

- ¿Cómo que?- Se adelanta a preguntar.

- Dijo algo de ¿dádivas?- Tengo que investigar que es eso- Alguien vendrá y no me gustará...- Prosigo contando cada una de las cosas, ella analiza lo narrado.