Lista De Misterios

Decembrina

MAD

Como creí y supuse la pequeña posiblidad de que Jack viniera por mi era de un 1%. Y las estadísticas jugaron en mi contra, creí que se iría con su padre y no fue así. Llego a mi casa. Ninguna de mis primas separa la mirada de él, se que me atacarían con preguntas cuando regresará a casa.

- Disculpa por llegar así sin avisar.

- No te preocupes. Gracias por sacarme de ahí.

- Son algo...

- ¿Extraños?- Añado

- Comunes. Son como una familia citadina, te observan mucho si eres diferente, te juzgan sin conocerte y hablan de sus suposiciones- Contradice, pero no me incomodan sus palabras ni molestan.

- Wow, no los hubiera descrito mejor. Se que son mi familia, pero al menos de esa parte no estoy tan orgullosa- Me sincero.

- Lo siento, no quise decirlo de esa forma.

- No, no. De verdad, se que no es tu intención juzgarlos, pero eso son, no estas diciendo alguna mentira.

Sigo comiendo helado. Y lo miro de vez en cuando. Es poco común que alguien coma helado en diciembre, estos días el frío cala los huesos, pero a él parece gustarle comer helado cuando hace frío.

Me gusta estar con él, me hace olvidar que tengo que regresar a casa, donde de no ser por mi tía y abuela estaría de cabeza.

- Mad.

- Sí...

- Hay algo que te he querido preguntar pero no se por donde empezar...- Me preocupa lo que quiera saber, pero lo dejo proseguir.- Mi tía Linda, me hizo plantear el hecho de que tu te fueras...- Eso me deja helada y me detengo.- y el asunto no para de darme vueltas, porque se que lo harías por tu mamá y para que todo sea más fácil. Tal vez tu ni siquiera lo habías llegado a pensar...- Si supieras que es lo único en lo que pienso.- necesito que me prometas, que si esa es la situación, te iras. No te detengas, no hay nada que te mantenga aquí. Menos yo, yo estaré para tí. Así pasen meses y años. Yo quiero lo mejor para ti y tu familia.

Trago saliva e intento tranquilizar cada parte de mi. Él lo dice tan fácil, como si no doliera mi ser al pensar que me iré.

- Esta bien, lo prometo.

Se acerca y me besa, poco a poco. Moviendo sus labios siguiendo un compás, haciendo que quiera quedarme ahí sintiendo sus labios con los mios y su respiración cosquillear en mi nariz.

Te extrañaré demasiado.

II

Llegue y comenzo el bombardeo. Una tras otra preguntaban si aquel "chico lindo" era mi novio, dónde lo conocí, cómo se enamoro de mi, quién lo confeso, hace cuanto saliamos. Y lo mejor que pude hacer fue decir:

- Sí, es mi novio. Lo conocí en la escuela. Yo que sé. No recuerdo. Tal vez tres meses. Duermanse y dejenme en paz.

Solo así callaron. Tenía que dejar de ser la "Madie" que era amable todo el tiempo y no sabe decir que "no". Es cansado que me hagan a su antojo.

III

Compras navideñas. He venido con mi abuela a comprar las cosas para la cena y los regalos de sus nietos. Como soy su favorita tengo el privilegio de escoger mi regalo.

- Madie, ¿entonces crees que el pavo, relleno sea buena opción?

- Claro- El pavo relleno es mi favorito. Tal vez no el de mis primos, pero no me importa tanto, igual de alguna forma debía tener un pequeño ajuste a mi favor.