Y la abrace, fue un impulso, de esos que me inspiran muy pocas personas, mas que todo de las que mas confianza tengo.
Hannah
Si cerebro como Hannah, pero incluso con ella me tomo tiempo darle tomar tanta confianza, pero aquí estaba yo, abrazando a una total desconocida, que por cierto es menor de edad.
Solte a America, la mire y esta absolutamente quieta, no se movia, dude si respiraba, así que opte por lo que me parecía lo mas sentato, aun con mis manos en sus hombros la empuje levemente hacia atrás, para estar a una distancia prudente.
-Si no me muevo no me ve, si no me muevo no me ve.- susurraba para si misma creyendo que no puedo oírla.
-¿America? – me anime a preguntar. -¿estas bien?¿sufres de androfobia?
Ella levanto la mirada, y es obvio que estando yo en la encimera sea mucho mas alto que ella, su mirada fue una mezcla entre la molestia y la confusión.
-Andro ¿Qué?- dijo mirándome fijamente.
-Fobia, ya sabes, miedo a los hombres, mira no conozco ningún caso de cerca, pero tengo una amiga que es psicóloga, y te podría ayudar.- ahora su mirada paso de estar confundida a ¿divertida?
- Joder, no sabia que los abogados se drogan, pero que gilipolleces estas diciendo, ¿miedo a los hombres?, claro, no a todos, solo a los que ni te conocen y te pegan a su cuerpo como si nada.- en definifitiva no era diversión, es malicia lo que veo en sus ojos, en parte tiene razón, pero ser tan tosca al hablar, que les enseñan a los jóvenes hoy en dia.
- Vale, lo siento por eso, fue un impulso.- dije subiendo mis hombros, no era tan importante.
- Ah no! Un impulso, pffff, un impulso, un impulso las pelotas que no tengo, yo me largo, no sé que hago aquí, ustedes son otro mundo, son viejos, tienen impulsos con menores de edad, seguramente si sigo aquí me encontrare con otro sujeto que nose, me bese, por impulso, y de repente luego a otro que me toquetee, por impulso, pero es normal, ¿no?- dijo deafiandome con su mirada.- Si me voy ahora talvez llegue a la fiesta donde haya chicos de mi edad con los que si quiera tener impulsos, no se si conozcas a Luana, pero dile que me fui por un impulso.- sentenció y salio por la puerta de la cocina.
Yo solo venia por una aburrida fiesta de abogados, a la cual nisiquiera Hannah pudo acompañarme-y si no esta Hannah todos nos íbamos a aburrir- y vengo a encontarrme con una niña que esta completamente loca, por lo menos no me aburri del todo.
Me baje de la encimera para salir detrás de ella, no pienso detenerla pero quiero ver si realmente se va, y dijo ¿Luana?¿la nueva?, creo que es la que me pidió ayuda con algo que no recuerdo ahora.
Antes de llegar a la puerta se escucharon gritos.
-¡Impulso!, me voy por impuslo.- si es quien creo que es, esta exagerando, de verdad es una exagerada, solo fue un abrazo, ni siquiera sufre de androfobia.
Sali y vi efectuvamnente que la niña estaba discutiendo con Luana, justo en la puerta principal de la casa, me acerque sigilosamente para que ninguna me viera, y al fin observe como era la exagerada, antes solo le vi los ojos, no me había percatado mas nada, si tuviera que describirla en una palabra seria "común", iba vestida con una falda plizada roja, una chompa de hilo negro y unas zapatillas, su cabello es largo, aproximadamente hasta sus caderas, sus caderas, no es delgada, podría apostar que tiene algunos kilos de mas, pero eso no es ningún impedimento para que se vea bien, seguramente por eso se le acerco Jesus, en todas las fiestas tiene que buscar alguna ingenua que caiga, lamentablemente hasta ahora solo America no cayo.
-Merica, mi tia me pidió que te quedes conmigo toda la noche, esa es la coindicion que te pidió para – dijo Luana pero la niña la interrumpio.
- Si, si, ya se carajo, pero estar aquí es aburrido Lu, no hay nadie de mi edad, mis amigos están en una mega fiesta, y yo aquí con puros tios, encima 2 ya se me insinuaron.- ¿Dos?, espero que no me este contando a mi.- y tu te vas a coger con ese tipo y me dejas aquí, Lu.-lanzó un suspiro- estoy cansada.
- Solo un rato mas, ya va a ser media noche y será muy complicado que encuentres un taxi para volver, no dejes que un mal momento arruine tu fin de año. Dale la vuelta a la situación.- Luana era buena tratando con niños.
-A huevo, pero si viene alguien mas dominado por sus impulsos me largo.- diciendo eso abrazo a Luana, luego le preguntaría quien es.
Creo que es momento de volver a la fiesta, fije mi camino hacia donde estaban todos reunidos pero luego escuche como azotaban la puerta.
-Ya llego por quien lloraban.- grito Hannah mientras sostenia varias bolsas llenas de cerveza.
- Crei que no vendrías.- dije acercándome a saludarla y obviamente a abrazarla, ella no era una loca que me armaria un escándalo por tener mis brazos a su alrededor.
-Si yo no venia, apuesto a que a media noche ya todos estarían durmiendo.- no refutaría eso porque tiene toda la razón.
- Toda la razón, ¿Pero y qué paso con tus "planes"?- y por planes me refería a la cita que tenia.
- Lo llame para cancelar.- estaba a punto de interrumpirla pero ella se me adelantó- y antes de que me digas algo, no busco una relación, así que no tendría sentido salir con él e ilusionarlo, preferí venir con mis amigos.- dijo sonriente.
- Pero que tenemos aquí, Hannah tu ausencia fue tormentosa.- dijo Samuel acercándose.
- Samy, no te preocupes que la noche recién comienza- le contestó.
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No te esperaré siempre
Teen FictionAmerica tenía una cosa clara: Vivir y disfrutar cada instante. Marco tenia dos cosas claras: Sacar a flote su Bufete para pagar su deuda, y no tener una relación amorosa que lo distraiga. Solo uno de los dos honró su palabra, el otro sufrió. ¿Como u...