El ojiazul me reconoció, y eso que no soy muy popular, por lo menos no en mi ciudad, me siguen mas personas en el extranjero que aquí, no creí que hubiera Meriquitos – nombre que les puse a mis seguidores –cerca, y sí que lo era por la manera en que me miro y se emocionó. Cogió rápidamente un bolígrafo que estaba cerca a él y me lo tendió. Sus ojos azules brillaban, el chico era guapo, alto, delgado, cabello pelirrojo –más claro que el de David – con pecas que adornaban toda su cara, no mas de 25 años.
– America. – dijo una voz lejana. – America. – repitió y me di cuenta de que era Marco.
– ¿Qué? – Dije saliendo de mis pensamientos.
– ¿Eres Youtuber? – Pregunto Marco.
– ¿No te lo dije? – pregunté, creí habérselo dicho antes, normalmente es lo que hago cuando convivo con una persona por más de una semana.
– Y la mejor. – agrego el pelirrojo.
– Gracias desconocido. – dije dándole mi mejor sonrisa.
– Cierto. – dijo Marco. – Los presentare. –¿Los?, ah si, había otras personas más en la sala.
Recién pude percatarme de donde estábamos, una sala de estudio de música, instrumentos de música estaban por toda a habitación, decorada de color negro y azul. Todos los instrumentos son hermosos, lastima que yo un asco para todos ellos, desde pequeña mi mamá me inscribió en varias clases para aprender a tocar guitarra, violín, batería, piano, flauta, trompeta, incluso la zampoña, pero nada; algunos nacen con dotes musicales, yo pues, nací con buena salud, ah y claro mi habilidad para hablar, por eso cree mi canal de YouTube.
– Este es André. – dijo tomando del hombro al pelirrojo.
– Andy. – corrigió él.
– La nena de Andy. – corrigió por dos la única chica, a parte de mí, que se encontraba en la sala. –Holy. – se presentó. Llevaba el cabello negro corto, de esos cortes que se asemejaban a los de varón, pero su voluptuoso cuerpo dejaba en claro que era una chica, usaba una playera rosa que me gusto al instante, unos pantalones rasgados color negro y unas botas altas, pero sin tacones, esta chica seguro era de la puta madre.
– Hol. – se quejó Andy e hizo puchero.
– Por cosas así es que te decimos nena. - dijo el último en presentarse. Parecía el mayor de todos, era más bajo que Marco y Andy, pero mas mamado, con una barba que aparentaba mucho tiempo sin afeitarse, el cabello debajo de los hombros, iba con una playera negra, un pantalón suuuuuuper ancho, y nótese suuuuuuper, porque era exagerado, ¿Dónde vendían esa clase de pantalones?, ni siquiera podía ver sus zapatos.
– Él es Fabio. – dijo Marco. El posible invocador de satanás me saludo con un gesto en la cabeza y yo hice lo mismo, haciendo que los demás rieran.
– Un gusto con todos, yo soy Merica. – dije al final.
– Cuando Marco me conto de ti, no pensé que fueras la misma Merica. – dijo Andy volviendo a mirarme con sus bellos ojos azules.
– No sabía que eras Youtuber. – dijo Marco, sonó mas a reproche que a lo que que sea que debía ser. – ¿Sobre qué es?
– Que más da. – dijimos Andy y yo al unísono y explotamos en carcajadas.
– Entonces si eres un Meriquito. – dije. Los demás chicos rieron.
– Sabía que eras una mariquita. – dijo Holy y estallo en carcajadas. – ay no puedo con esto.
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No te esperaré siempre
Teen FictionAmerica tenía una cosa clara: Vivir y disfrutar cada instante. Marco tenia dos cosas claras: Sacar a flote su Bufete para pagar su deuda, y no tener una relación amorosa que lo distraiga. Solo uno de los dos honró su palabra, el otro sufrió. ¿Como u...