Capítulo 2

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Era viernes por la mañana cuando me llamó mi hermana Valentina a pedirme que le ayudara con la fiesta sorpresa de novio Nico. Pese que ella era menor que yo, tenía una mente muy madura y seria para su edad; esta se puede demostrar en la relación que tenía con su galán. La fiesta se iba a realizar en una discoteca muy popular de la zona ya que a Nico le encanta bailar. Fui con mi hermana a comprar los últimos arreglos para su regalo.
Valentina: Estoy muy nerviosa por la fiesta de hoy, ¿Crees que le gustará?
Poché: Claro que sí, ya verás como va a salir bien.
Valentina: Gracias pollito, no cualquier hermana recoge a los mejores amigos y al hermano de su novio. Muchas gracias, y no te preocupes por recogerme, yo me iré sola.
Poché: Ahí te equivocas, no voy a ayudarte sólo con eso, sino que también estaré con ustedes.
Valentina:¿ Y esa sorpresa? Tú siempre me pones un millón de escusas para no salir de tu rutina.
Poché : Bueno, eres la mejor hermana del mundo y además necesito distaerme un rato para volver a full con mi entrenamiento.
Además que si me da resaca y llego a vomitar, podré sacar ese feo atún de mi sistema, pensé.

Se pasó muy rápido el día y en un pestañar ya era de noche. La música estaba muy fuerte pero me encantaba, esta discoteca aparte de ser la más exclusiva de la ciudad, tenía los mejores tragos. Me fui a la barra divizando a lo lejos a mi hermana con su acompañante, se los veía muy felices. Ellos parecían estar bailando su propia canción mientras que los 4 amigos de Nico bailaban a su alrededor.
¡Cómo quisiera tener una relación así!
Lo dije mientras soltaba un pequeño suspiro.
Tomé el vaso de golden VIP, un trago exclusivo de la discoteca, que el cantinero acaba de poner delante mío y de un trago me lo acabé. Repetí esta misma acción con un vaso de whisky. De pronto, la música se escucha el siguiente anuncio:
Chicos y chicas, bienvenidos, como es tradición, ¡¡¡¡hoy es sábado de batalla de reflector!!!
La gente empezó a gritar emocionada en forma de aprobación.
Así que muestren sus mejores pasos de baile y los mejores tres serán lucharán cara a cara para ver quién es el rey o reina de VIP*.
Fui a donde estaba mi hermana con su novio pero de la nada empieza a sonar una salsa y siento una mano que me toca el hombro y una voz masculina me pregunta si quiero bailar. Era Alejo.  Él era un chico promedio, y tímido en la secundaria pero cuando su padre se cansó con la mamá de Nico, ambos se congeniaron al toque, es más, este último le presentó a su actual pareja,Mario. Por lo que, no sé si por agradeciemiento o algo, empezó a invitar muy amenudo a mi hermana, a las fiestas que organizaban en su lujosa casa ya que sabía que a Nico le gusta hace mucho tiempo pero nunca se armaba de valor para invitarla. Y ahora es muy amigo de mi familia y mío.
Alejo: Tierra a Poché, ¿estás ahí?
Su voz me devolvió a la realidad.
Poché: Sí, claro Alejo.
Alejo:  Bebé, hoy tenemos que festejar por Nico, por la juventud y por nosotros. No debes estar ida, disfruta tu día libre.
Tenía razón, no es momento para hundirme en mis pensamientos.
Poché : Lo siento bebé, ahora sí me pondré en modo baile.
Alejo: Así me gusta, además quiero bailar algo mientras que Mario guarda los abrigos y me trae mi mojito.
Jajajaja #MarioGobernado, yo nunca haría algo como eso.
Mario se nos unió a los pocos minutos y bailamos los tres por una hora seguida, tanto así que ya no pude ver a Vale. Me preocupé un poco pero este último en llegar me señaló hacia los pequeños puffs que había en la zona Super Vip. Me tranquilice un poco. Siguimos bailando hasta que me dio sed, así que fui a la barra y me pedí una margarita, y un agua. Lo sé, es que no suelo tomar y cuando lo hago trato de beber agua después porque sino me choca rápido el alcohol.

Recuerden chicos que a las 2 escojeremos a los mejores 4 finalistas (2 mujeres y 2 hombres) para decidir quién de ellos se lleva la corona de mejor bailarín hoy! ¿Será que tendremos una reina o será un rey?

Otra vez el dj promocionando el concurso de baile. Bueno dudo mucho que me escojan, igual solo quedan 2 horas para eso.
Sin prestarle mayor importancia, volví con los chicos y continué bailando.

La Copa - Caché Donde viven las historias. Descúbrelo ahora