DOMINANTES

Capitulo 17

Estas ultimas semanas me las he pasado en el interior de la casa, el sentimiento de ser observada se hace presente cada vez que salgo de esta, por lo que únicamente salgo acompañada por alguno de los chicos.

Dentro de una semana será mi cumpleaños, se supone que debería de estar pensando y planificando que es lo que querría hacer en ese día, pero lo único que tengo en mente es a ese acosador, últimamente no ha estado mandando fotos ya que no puede conseguirlas si estoy dentro de la casa, pero cada vez que salgo más allá de los muros de la mansión recibo alguna que otra foto.

Cada vez que pienso en lo enferma que debe de estar una persona para hacer esto mi cuerpo se estremece, una persona así estaría dispuesta a hacer cualquier cosa con tal de conseguir lo que desea.

En este momento me encuentro recostada sobre la gran cama que compartimos los cuatro, cuando desperté noté que Derek y Andrew no estaban, al preguntarle a Max quien ahora se encuentra acostado abrazándome, me dijo que habían tenido que salir, pero que no me preocupara.

-¿No quieres ir a desayunar o comer algo?.- pregunta Max a la vez que se sienta en la cama.

- Si claro.- respondo animada, en verdad hace un rato que tengo hambre pero estaba tan a gusto en la posición en la que me encontraba que no quise moverme.- ¿Que tienes en mente?.- le digo a la vez que empezamos a caminar en dirección a la cocina.

Hay que admitir que la casa es verdaderamente hermosa, cada vez qué paso por cada sector de esta descubro nuevos detalles, que solo hacen que me sienta mas a gusto estando aquí. Al principio pensé que solo sería por unos días que estaría aquí, resulta que al final llevo alrededor de un mes aquí, extraño un poco mi apartamento, aunque los chicos han pedido que traigan todas mis cosas.

No he querido hablar mucho con Samantha, Rebeca y Rob, temo que algo pueda sucederles por estar en contacto con migo, por lo que solamente hablamos por un teléfono privado una ves cada tres días.

Max me saca de mis pensamientos cuando deposita frente a mi un tazón con fruta picada y un vaso de yogurt.

El desayuno lo pasamos entre risas y toqueteos, es que, ¿como podría resistirme con un hombre como él?, que se preocupa sobre mi seguridad, y que se ha convertido en uno de los dueños de mi corazón.

Horas después.

El reloj marca las seis de la tarde y los chicos aún no han vuelto, ellos nunca están tanto tiempo sin comunicarse conmigo, por lo que empiezo a preocuparme por si algo ha pasado. Max se encarga de tranquilizarme tratando de distraerme.

Media hora después recibimos una llamada en la que nos informan que Derek y Andrew se encuentran en el hospital, aparentemente una camioneta los ha envestido.

Sin reparar en nuestra ropa ni nada, salimos corriendo en busca de los autos, una vez en este emprendemos la marcha hacia el hospital.

Una vez llegamos bajamos del auto a toda velocidad y nos dirigimos a la recepción.