Manipulación. [Dazai x tú]

Capítulo 3: Resolución de un caso.

Un nuevo día comenzaba en Yokohama, los primeros rayos del sol estaban empezando a llegar a la ciudad pero T.N ya estaba fuera de su casa, a las afueras de la agencia, para observar un poco más a su objetivo. Claramente estaba a unos metros de distancia para no ser vista cuando ellos legaran a trabajar, además de utilizar algo parecido a un disfraz, aunque nadie la conociera aún ya que podría ser problemático en el futuro haber sido vista espiándolos.  

Luego de unas horas, empezaron a llegar los miembros de la agencia. Uno de los primeros en llegar fue Kunikida quien luego de mirar su reloj y esperar que sean exactamente las 7:00 a.m ingresó al edificio.

<< Sorprendente... ¿Que te apuesto que tiene todo organizado?>>

Se preguntó a si misma mientras tomaba un sorbo de té que pidió en una cafetería que estaba cruzando la calle, la mesa en la que estaba le daba una vista perfecta de su objetivo.

<< No me sorprendería que tenga todo anotado en una agenda o cuaderno>>

La chica tenía una buena capacidad deductiva, lo que le estaba ayudando mucho en su misión.

Poco a poco los integrantes fueron llegando siendo el último Atsushi, el chico parecía un poco apurado ya que iba tarde. 

T.N miró atentamente al joven, según su investigación este tiene la habilidad de convertirse en un gran tigre blanco, claramente era un poder que podría complicarle ya que, aunque tenía conocimientos de artes marciales,  su propia habilidad no efectiva en combate cuerpo a cuerpo.

Al pensar en sus entrenamientos la imagen de su padre vino a su mente, un ex militar retirado con honores pero que era estrictos con sus hijos y un poco violento. A pesar de todo, ella lo quería y en estos momentos lo extrañaba. 

Cerró fuertemente los ojos para evitar que una lagrima se le escapara, luego los volvió a abrir para ver como un auto que estaba estacionado explotaba alterando a todos y haciendo que muchos salieran de los edificios. 

<< ¿Que rayos fue lo que pasó?>>

Pronto mucha gente rodeo el lugar a pesar de ser peligroso, los de la agencia cerraron el perímetro y empezaron a investigar lo que había pasado. Todo parecía indicar que era un simple accidente, alguna falla mecánica que terminó de esa manera, para suerte de todos no hubo heridos. 

— Es una lastima, el auto quedó completamente destruido. — Comentó alguien cerca de T.N aunque el comentario también fue escuchado por Atsushi y otros curiosos.

— ¿De quién será el vehículo? — Preguntó alguien más.

De pronto una nueva explosión se escuchó.

— Rayos, el fuego llegó al gas 

— Será mejor que nos pongamos en un lugar seguro 

— Si

— Espero que el dueño del auto no haya tenido nada importante en el maletero.  

<< ¿Maletero? ¿Auto? ... ¡Lo tengo!>>

En la mente de Atsushi una teoría sobre el caso Furuya se había formulado, ahora solo debía comprobarlo y decir sus deducciones a todos. 

— Kunikida-san — Lo llamó el peliblanco.

— ¿Que pasa?¡Debemos correr a la gente antes de que una explosión más grande los alcance! —Gritó un poco alterado por la situación.

— tiene razón, ¡le ayudaré!

Luego de que la situación estuvo controlada y la mayor parte de la gente se había ido el chico nuevamente llamó al rubio, aunque no solo capto la atención de él, una chica los escuchaba atentamente entre las personas.