(Narra Taehyung)
La luz comenzaba a molestar en mis ojos y me negaba despertar de este sueño tan perfecto. La cabeza me dolía pero aún así intentaba regresar a ese momento en el que Jungkook confesaba que estaba enamorado de mí y que todo lo que esas palabras generaron después.
Mantuve mis ojos cerrados y no moví ni un sólo músculo de mi cuerpo. No quería abrir los ojos y encontrarme con la triste realidad de que ese momento realmente nunca pasó. Acomode un poco mi brazo debajo de mi cabeza y caí en cuentas que no estaba sobre mi cómodo colchón, de seguro había caído al piso de mi habitación en medio del sueño y nunca me había percatado.
A regañadientes levanté una de mis manos intentando tocar la cama y así ayudarme a ponerme de pie, pero nunca logré encontrarla, debía abrir los ojos y mirar que tan lejos había caído. Hice el ademán de incorporarme pero fracase rotundamente en el intento ya que algo presionaba suavemente mi cadera. Lentamente abrí los ojos y lo primero que veo, es ese lugar mágico con el que estaba soñando, salvo que ahora podía apreciarlo a plena luz del día.
Me había quedado embobado mirando el agua desde la cascada hasta el lago. Mi corazón comenzó a latir con intensidad cuando mi mente me enviaba pequeños flashes de lo que creo que había sido un simple pero perfecto sueño. Dirigí mi mirada hacia la leve presión en mi cadera y una enorme sonrisa se formó en mi rostro al ver que era un brazo. Mejor dicho, su brazo.
Jungkook aún dormía, junto a mi con su remera blanca y su pantalón de color negro. La luz del sol parecía hacerle aún más brillar su piel y definir más el color de su cabello. Me quedé observandolo completamente atontado y un poco emocionado. Realmente había sucedido. No fue un sueño, todos esos recuerdos en mi mente, había sido completamente reales.
Mire a mi alrededor apreciando nuevamente el lugar en el que me encontraba, no sabía que hora era y para ser honesto tampoco me importaba. Deseaba quedarme aquí todo el tiempo que la magia durará y rogaba que lo hiciera por mucho, mucho tiempo.
─Hola ─susurró una voz ronca sacándome de mis pensamientos.
Gire mi cabeza hacia mi izquierda y lo vi a él. Con su pelo completamente desordenado, mirándome con los ojos levemente achinados y una enorme sonrisa en su rostro la cual correpondí en cuestión de segundos. Jungkook se incorporó sin quitar el brazo que aún se encontraba sobre mi cadera y se acercó a mi para darme un corto beso en los labios.
─Hola ─conteste sonriente. ─¿Cómo Estas? ─Pregunté tímido.
Jungkook sonrió y se acercó nuevamente a mi para envolver mi cintura con sus brazos y apoyar su mentón sobre mi hombro izquierdo. Beso tiernamente mi mejilla y luego dejo caer su cabeza sobre la mía.
─Mejor que nunca ─contestó haciéndome sonreír aún más. ─¿Deberíamos volver? ─preguntó apegandome más a él.
─Creo que si ─dijo encogiendose de hombros.
Jungkook beso nuevamente mi mejilla y de un salto se puso de pie. Extendió su mano frente a mi y enseguida la tomó para que me ayudará a levantar de la roca en la cual había dormido casi toda la noche. Una vez de pie, Jungkook me dedico una tierna sonrisa para luego pasar ambos brazos alrededor de mi cintura y besar mis labios.
Ambos sonreimos entre besos como recordando todo lo que había sucedido tan sólo unas pocas horas atrás. Jungkook se separó de mi y entrelazado nuestras manos emprendiendos el camino de regreso al campamento.
Aún no podía creer que todo esto fuera real. Me costaba entender como alguien como él, podía enamorarse de alguien como yo, sobre todo con un pasado como el nuestro. Entonces recordé ese famoso dicho que Dice "Del amor al odio hay un sólo pasó" e inevitablemente sonreí.
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¿Otra vez tú? ; Kookv.
FanficKim Taehyung, un adolecente de 17 años, luego ser el centro de burlas en su antigua secuandaria a manos de Jungkook, consigue rehacer su vida cuando a su madre le ofrecen nuevo trabajo en Seúl. Todo marcha bien en su nueva vida, pero lo que él no cr...