Capítulo 22: "Un simple campesino"

726K 25K 7.8K
                                    

ADELINE POV

Ahora, la pregunta es, ¿Por qué en todas las situaciones… extrañas, tenían que estar involucrados los gemelos? Bueno, no es que pueda ponerme a pensar esto ahora, claro, porque técnicamente estoy en medio de un asesinato. O esperen, tal vez no es un asesinato, tal vez es un secuestro, o tal vez son alienígenas que vienen a reclamar su lugar en la tierra, honestamente, no sé en qué mierda estoy metida, pero me gustaría bastante averiguarlo, así que dejaré mi conciencia a un lado y me concentraré en la escena.

Luego del disparo el silenció reinó en… la jungla, también todos nos quedamos congelados, me daba miedo hasta pestañear. ¿Alguna vez estuvieron presentes en una situación que llevaba involucrada un arma? Y ahí vamos de nuevo con el auto psicoanálisis… solo ignórenme. Como siempre suelen hacer.

Ryan se erguía sobre mí, ya que antes estaba cogiéndome de la cintura para sacarme del auto y sentarse él en el lugar del conductor, claro, ¿Cómo era posible en el mundo que Ryan Whitley me diga “¡Cómo me gustaría ser papel para envolverte, bombón! ¿Podrías pasarte al asiento de atrás para que pueda conducir”?

O bueno, tal vez sin el elogio (ya todos sabemos que aunque no lo diga, lo piensa) Aunque siendo sincera seguramente me habría reído en su cara si me lo preguntaba, es decir, ¡Nos hicieron una broma que gracias a ella podríamos estar todos muertos!

Y bien, me fui de tema otra vez. Sé que se están muriendo de ganas por saber de qué se trataba aquel disparo, y les voy a conceder el deseo de saber qué está sucediendo solo porque yo también quiero saber.

Como ya dije, todos nos habíamos congelado, así que Ryan tenía sus manos en mi cintura y tapaba mi vista, su cuerpo ocupaba la puerta del auto, tal vez debería bajar los postres. Bueno, a quién engañamos, tiene un cuerpo para morirse.

Hice contacto visual con Ryan, sus ojos verdes me miraban decididos, me guiñó un ojo y se giró lentamente. Tragué saliva fuertemente y sentí que alguien me cogía de la mano. Trinity. Estaba sentada en el asiento del acompañante, mirándome con ojos preocupados. Miré por el parabrisas, frente al auto estaba Chase parado, mirando a lo lejos, con el ceño fruncido.

-¿Qué está sucediendo? –susurré, sabiendo que los gemelos me escucharían.

De repente se escuchó otro disparo. Esta vez reinaron dos gritos femeninos. Pensarán que fueron míos y de Trinity, pero nop, fue uno de Trinity y otro de Chase. Rodé los ojos y antes de que otro pensamiento pudiera pasar por mi cabeza, pasó algo bastante desconcertante.

Chase estaba en el lado del acompañante con Trinity en su regazo, y Ryan estaba debajo de mí mientras yo estaba sentada en su regazo con cara de “¿Qué re carajos?” Ryan pasó sus brazos alrededor mío y las puso sobre el volante.

-Adeline, rápido, gira la llave –me dijo en un tono nervioso. Giré las llaves y Ryan comenzó a presionar el acelerador. Mierda. No nos movíamos.

-Mierda, mierda, mierda, Ryan, se acerca –susurró Chase. Ladeé mi cabeza hacia la izquierda. Un señor… o un campesino, como sea, llevaba una escopeta en una mano y un arma en el cinturón. Tenía un sombrero de paja y nos miraba furioso.

-¡SALGAN DE AQUÍ AHORA MISMO! ¡SHU! ¡SHU! ¿QUIÉNES SE CREEN QUE SON PARA ENTRAR A NUESTRO TERRITORIO? ¡VÁYANSE! –comenzó a gritar mientras se acercaba.

-Adeline, por más de que me encante, que realmente me encante, tenerte arriba mío, debes pasarte ahora mismo a los asientos de atrás si quieres seguir con vida –me susurró Ryan al oído. Asentí una vez y llevé mi mano a la puerta. Saldría por la maldita puerta, me metería en los asientos de atrás, y, adiós campesino. – ¿Estás loca? –me siseó Ryan en el oído. –Pasa por aquí y no se te ocurra a salir del auto –agregó ayudándome a pasar por el hueco que había entre su asiento y el de Chase/Trinity.

Guerra de gemelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora