-Elemento destructor-
Diego
— ¡Despertad! — escucho la voz de Linda y trato de cubrirme mis oídos mientras suelto varios quejidos —Diego, será mejor que levantes tu trasero de ahí y te apresures — habló en tono de advertencia.
— Tú pudiste dormir como un día entero, yo no he dormido nada —trato de excusarme.
— Bueno, ya te dije que tenemos que entrenar, está apunto de empezar el amanecer así que será mejor que te levantes o te quedarás aquí tirado —pude escuchar la voz de Laura a lo lejos y yo solo suspiro.
Pongo mi rostro de medio lado y abro mis ojos, siendo recibido por la casi plena oscuridad.
— ¿No ha salido el sol y ya vamos a entrenar? — refunfuño mirando a mi alrededor — ¿No es un poco exagerado? ¿En que momento aclaramos esto?
— Lo decidimos mientras tú ibas por tu quinto sueño — ahora habló Steven y yo solo fruncí mis cejas con cansancio — queremos ver el amanecer antes de empezar, así que será mejor que te levantes de una buena vez por todas.
Con cansancio y mucho sueño me levanto del intento de cama y empiezo a arrastrar mis pies en un pésimo intento de caminar.
Mi vida se basa en fracasos llamados intentos.
— No seas exagerado y empieza a moverte con rapidez, a este paso llega antes el invierno que nosotros a ver el amanecer — se queja Laura mientras me empuja por la espalda, haciéndome casi caer de cara contra el suelo.
— Con está oscuridad no veo nada, ¿cómo esperas que camine sin caerme de boca contra el piso? — les intento convencer, sin embargo, a Laura no parece importarle demasiado y continúa empujándome "levemente" — ugh, que intensos que son, estoy caminando, estoy caminando... —hablo en medio de un bostezo.
— Me transmites tus ánimos, Diego —habló sarcástico Steven — pronto te darán un premio por mantener la energía y el positivismo en el ambiente.
— ¿Y cuándo dije yo que estaba tratando de ser positivo? — si, yo siempre a la defensiva. ¿Qué puedo decir? Está en mi ser.
— Ya supérenlo, el bebé Diego se ha levantado de mal humor — les dice Linda mientras toma una de mis mejillas y la estruja levemente.
— Ya suéltame — trato de sonar "molesto" y eso solo hace que ellos se rían más — al parecer ustedes andan demasiado chistosos hoy, con solo eso sé que hoy será un muy largo, largo día... — de sujetar mi mejilla ahora Linda me da un leve golpe en la parte trasera de mi cabeza — bien, bien, ya me voy a callar.
— Una muy sabia idea Diego. Me sorprende viniendo de ti — escucho a Steven a unos pasos más adelante.
— ¿En serio van a estar todos en mi contra hoy? — pregunto con cansancio y continúo con el proceso de arrastrar mis pies, perdón, caminar.
—Tú lo has dicho, no yo —ahora continúa Laura y nuevamente todos menos yo empiezan a reír.
—Ti li his dichi, ni yi —intento imitarla y solo siento cuando una piedra pequeña me golpea en la frente.
ESTÁS LEYENDO
Los Cuatro Elementos [Editando]
FantasiaEsta es la historia de cuatro jóvenes, quienes habitan en un pequeño y apartado reino: Præston. Estamos hablando de Laura, Steven, Linda y Diego. Cada uno con una habilidad diferente que un día en especial se les presentan. ¿Son acaso estos nuevos p...