10 años después....
El amor es algo que todos deberíamos recibir por lo menos una vez en la vida.
Cada uno lo ve a su manera, y con gente diferente.
El amor está hecho para todos y no podemos evadirlo.
Es cosa de esperar y ver lo que tienes enfrente.
Allí estaba el.
Acostado junto a la niñita de sus sueños, leyendo un libro.
Una hermosa niñita con claros cabellos rubios, tan bella como las mismas flores en primavera.
- mira quien está allí, es mami!- dijo el lanzando una mirada irresistible.
- mami!!, quieres leer con nosotros?, vamos a saber que pasó con cenicienta al final del baile....-
Esa dulzura.
Esa ingenuidad.
Esa belleza.
Propias de la niñita más tierna y encantada de este planeta.
Mi hija.
Daisy.
Nunca pensé que podría llegar a amar tanto a alguien.
Esa ligereza y cuidado con que el la trataba y cuidaba hicieron de ella la niña perfecta.
Yo nunca creí que el amor familiar llegaría a mi vida.
Nunca creí que fuera digna de este amor tan incondicional.
Nunca creí que alguien podría llamarme simplemente 'mamá'.
Yo nunca creí que terminaría teniendo esta vida.
Pero ahora que la tengo.
No la cambiaría por nada en el mundo.
Era feliz.
La felicidad es algo difícil de encontrar.
Difícil de conseguir, eso todos lo sabemos.
Los obstáculos no son fáciles de superar y muchos caen en el camino.
Pero cuando la obtienes nada puede arrebatarla de tu vida.
Amaba mi vida.
Y la seguiría viviendo feliz y dispuesta, con mi esposo y mi hermosa hija.
La seguiría viviendo...
Como un sueño.
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Espero que les halla gustado.
Muchísimas gracias por todo.
Sin ustedes está historia no tendría como contarse.
Aún no se sí haré una segunda parte, necesito sus opiniones.
Los quiero.
Cualquier cosa no duden en enviar un mensaje.
Pueden pedir mis datos y hablar por interno.
Les vuelvo a agradecer por todo su apoyo y toda su paciencia.
Y chicos....
Vivan su vida como un sueño.
Muchas gracias.
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Como un sueño
RomanceHabía estado junto a el toda la noche? Me di la vuelta para mirarlo frente a frente. Apoye mi cabeza en su fornido pecho. Algo comenzó a arder en mi interior, algo que nunca había sentido. No quería moverme ni apartarme de el. Levanté la vista y lo...