In the paradise 25.

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Sentí como mi cuerpo era acomodado en un lugar blando y el calor de los brazos de mi hombre me había abandonado.

Abrí mis ojos y miré a Michael frente a mi, acobijándome, me había subido a la habitación y recostado sobre nuestra cama, besó mi frente y se acostó a mi lado.

Me giré para quedar frente a él y me mostró una sonrisa, y llenó de besos mi frente.

Sonreí y me uní más a su cuerpo. Coloqué mi mano sobre su mejilla y lo besé, cuando nuestros labios estuvieron separados, lo miré a los ojos y noté un cierto brillo en ellos.

—Bésame—Supliqué, atrayendo su cabeza hacia a mí, mientras el me sonreía.

Lo atraje a mi de manera que quedó sobre mi y continuó besándome.

—La señorita Jackson, está muy melosa esta noche ¿no es así?—Me dice y sonríe.

Reí un poco.

— Me haces muy feliz, ¿Como no debería de estarlo?—Pregunto y beso su nariz.

Acaricia mi cabello y acomoda los mechones de mi cabello.
—Tú también me haces muy feliz—Dice serio y con la mirada brillosa— ¿sabes? Desde que me dijiste que "sí" no he parado de agradecer le a Dios y a la vida por ponerte en mi camino, y ahora me doy cuenta que..—Dice acariciando mi mejilla, mientras lo miro fíjame— ha valido la pena vivir todas las cosas horribles que viví, tu eres mi recompensa por tanto dolor y tanta soledad, y co el corazón en la mano te digo que si es necesario que vuelva a vivir todo lo que viví, lo volvería a hacer, solo si tú volvieras a ser mi recompensa.—Mis ojos se cristalizan por tan bellas palabras y dejo salir un par de ellas, Michael las limpia enseguida y solo sonríe— Sé que es tan tonto lo que estoy diciendo, soy tan cursi, pero tú me inspiras de todas las maneras posibles, y quizás nunca antes había dicho algo parecido, no al menos cuando tú estabas despierta, pero, ya no quiero ocultar lo que siento por ti, me cansé de fingir, te amo Beth, y disculpa me Por todas esas veces que fui un tonto, y mi orgullo nos separó en repetidas ocasiones, es solo que después de tanto tiempo olvidé la manera correcta para amar a alguien, olvidé lo que se siente tener a alguien a mi lado, la soledad fue muy cruel para mi, pero ahora que te tengo a mi lado, no voy a permitir que nadie nos separe.

Lo besé con lágrimas en mis mejillas y lo abracé tan fuerte.

El sonido de los pájaros mañaneros, me despiertan y abro levemente los ojos.

Miro mi mano izquierda y veo el anillo de compromiso que me dio anoche Michael. Y me di cuenta que no era un sueño si no la realidad, y toda la felicidad llega a mi cuerpo, me giro para ver a Michael quien me está abrazando, su cabello esta despeinado, se ve tan tranquilo.

Bese sus labios y sonrió, así que los volví a besar.

—Dime que es la realidad, y que seguirás besándome para nunca más abrir los ojos y que me beses así por siempre—Susurró con una sonrisa sin abrir los ojos aún.

Comencé a reír.

—¿Como amaneció la señorita Jackson?—Sonríe y besa mi quijada.

—Feliz de tenerte para mi—Acaricié sus rizos y el me sonrió.

Tocaron la puerta, y Michael le dijo a la persona que estaba detrás que pasara.

—Buenos días señor, dice Casandra que si gustan bajar a desayunar, que el desayuno está listo.—Sonrió Taylor desde la puerta.

Le sonreí y me senté en la cama.

—Taylor, ¿podrías decirle que hoy no desayunaremos en casa?—Le dice Michael y me abraza.

Neverland | EspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora