Fragancias [+18] ShowKi [EN PAUSA]

Fragancia adictiva

"No es el primer ligue que trae Hyunwoo, pero me sorprende que seas un hombre" dijo un chico de apariencia de un delincuente aunque cuando sonrió fue todo lo contrario.

Caminé por los pasillos de la oficina sosteniendo un montón de copias que me tapaban la visión y amenazaban con caerse. Moví mis pies lo más rápido que pude para alcanzar mi escritorio y poder colocarlos allí. Sentí chocar con algo y creí que todo terminaría en el piso, pero el peso disminuyó de mis brazos.

-¿A dónde van?-

-Sobre mi escritorio- respondí mientras veía la espalda robusta de Wonho que llevaba las copias.

-¿Qué es esto? ¿Acaso te pondrás al día con los proyectos que quieren sacar?- dijo entre risas después de haber dejado los papeles y leído el primero.

-Si, de hecho voy a analizarlos- respondí nervioso.

-¿Qué?- me miró sorprendido -¿Acaso querés fundirte en la silla? Porque si es eso dime qué te puedo dar una pila de documentos que debo leer- bromeó mientras se apoyaba con su entrenado trasero en el borde del escritorio y cruzaba los brazos dejando resaltar más sus músculos.

¿No podía ser más varonil y sexy? No, si era más hombre ¿donde quedaría mi orgullo? Definitivamente muy lejos, más de lo que ya está cuando estoy cerca de él o de Son.

-No tendría problema en aceptarlos- respondí a su chiste con un tono serio que no debió ser tan serio.

-Muy bien, te tomaré la palabra- me guiño muy coqueto y luego sonrió -Kihyun-ah sabes te debo una disculpa- fruncí mi ceño al no entender -por lo de la otra vez en la peatonal, no suelo ser tan grosero pero estar con Hyunwoo me vuelve un idiota igual que él- sonrió nervioso.

-¡Oh! Está bien, todos podemos ser unos idiotas aunque sea una vez en nuestras vidas- Kihyun insulto a su jefe y se dio cuenta después de haberlo hecho. Se avergonzó y arrepintió de haber hablado tan a la ligera.

Espero por la reprimenda de su jefe, pero en cambio este, le esbozó una gran sonrisa sincera.

-Tan directo... Me agradas Kihyun-ah- dijo mientras pasaba el brazo por el cuello del más pequeño y lo bajaba hacia su pecho para revolverle los cabellos castaños de este -¡Kkukkungie!- exclamó para luego soltar a Kihyun para ir por su pareja.

-¡Hyung le estuve buscando por todos lados!- un joven le habló con formalidad y con aegyo que hizo que el mayor se derritiera por dentro -¡Quiero comer!- dio pisaditas en el piso agregando más ternura.

-Owwww ¿mi cachorro tiene hambre?- pregunto y el menor asintió haciendo puchero -dejame alimentarte bien- le guiño el ojo y después tomo su mano para llevárselo.

Por un momento me sorprendí porque era la primera vez que veía a aquel joven siendo de esa manera frente a alguien más que no sea Wonho. Siempre que se lo veía sonriendo con Wonho y aparecía alguien frente a ellos, él, dejaba de sonreír y se mostraba serio, pero esta vez no fue así y me sorprendió haciendo un poco de aegyo para que su novio le lleve a comer de una vez por todas. Tierno, pensé que era muy lindo y tierno. Eso también me recordó que tenía que comer pero si salía de la oficina puedo cruzarme con Hyunwoo, aunque este puede venir si me quiere molestar, pero entre su trabajo las probabilidades de que lo haga eran escasas ¿Cierto?. Dejé de pensar en Hyunwoo y en la posible mamada que le habré dado y me senté detrás del escritorio donde empecé a ponerma más que al día con los proyectos.

Después de más de seis horas de estar sentado allí con el trasero entumecido y el dolor de estómago molestándome, decidí ir por un café a la mini sala de descanso donde había una modesta cafetera que amenazaba con autodestruirse luego de dos o tres cafés más.

Cuando saque la vista de mi escritorio me encontre con que estaba solo en la oficina, en su sección y en el piso entero.

-Vagos..- susurré para después soltar un suspiro y fui directo a la sala por mi café.

La puerta de la sala estaba totalmente abierta así que solo entré sin hacer demasiado escándalo. Frene de inmediato y al querer dar una vuelta de huida me choque estrepitosamente con el marco de la puerta. Quiero desaparecer.

-¿Estás bien?- se acercó la persona de la que quería evitar más que a nadie en la tierra se acercó a mí.

Cuando quiso poner su mano en mi frente la hice a un lado de un manotazo. Un recuerdo de mi noche de borrachera vino a mi donde, Hyunwoo, me besaba y no pude evitar sentir vergüenza.

-Si estoy bien- respondí malhumorado por el simple hecho de haberlo besado ¿O el me besó a mí?

-¿Venías por café?- pregunto Hyunwoo volviendo a posicionarse enfrente de la cafetera.

-Que pregunta más tonta ¿Para que vendría a una sala donde solo hay una cafetera?- pensé pero en realidad salió en voz alta.

Hyunwoo me miró pero no dijo nada, en cambio, estiró su mano hacia la gaveta del estante de arriba y saco dos tazas. Las dejo a un lado de la máquina y espero a que el café termine de caer.
Me pareció raro que no dijera nada o que no me molestara, pero no dije más nada y quedé esperando a que termine de colarse el café. Una gota, dos gotas, tres gotas y la jarra ya estaba llena. Esperaba a que Son se sirva pero no lo hizo, solo miraba fijamente la máquina.

-¿Algo va mal?- pregunte casi dudando de si hacerlo o no.

No dijo nada.

-Kihyun- di un pequeño salto ante el tono de su voz pero después todo quedó enterrado en silencio -olvidalo- agrego sirviendo su café -aqui- señaló en café que dejó para mí a un lado.

Algo no estaba bien, este no era el idiota que me molestaría sin perder la oportunidad, algo grave debía de estar pasando... Pero ¿Y a mi que me importa?.

Fui a agarrar mi café y Hyunwoo por primera vez levantó la mirada, después de un largo tiempo, me miró a mí y luego su mirada quedó colgada atrás mío.

-Kihyun- volvió a llamarme antes de que me girará para irme y yo le quede observando -te amo-

-¿Qu- no pude terminar, fui interrumpido por los gruesos y sabrosos labios de Hyunwoo ¿Sabrosos?.

Solo podía ver a Hyunwoo con los ojos cerrados y "disfrutando" del beso. Intenté apartarme pero, de nuevo, Hyunwoo es más fuerte que yo, y en algún momento me deje llevar por el beso. Era imposible resistirse, su lengua entraba y experimentaba con las partes más sensibles de mi boca. Llegaba hasta el fondo y no era incómodo, solo ocasionaba cosquilla y satisfacción. La succión sobre mis labios era justa y necesaria. Todo en aquel beso era perfecto y hasta diría excitante.

Casi tembloroso subí mis manos a su cuello y lo agarre de la nuca para atraerlo con fuerza hacia mí, y así, disfrutar más del beso. Investigue y volví a repasar cada parte de su cavidad bucal. Mi mente se nubló y todo a mi alrededor se borró al chupar su labio inferior, y al sentirlo tan delicioso en mi boca, lo estire a medida que nos separabamos del beso junto a un gemido mío.

No quise abrir mis ojos pero el resoplido de Hyunwoo indicaba que estaba más que satisfecho por mi respuesta a él. Se bajó lo suficiente como para tomar mis piernas y volvió a atacar mi boca como antes, no mas que ahora, nuestros miembros medio erectos se tocaban. Volví a gemir, inconscientemente, al sentirlo y me quise ir de allí para conservar la poca dignidad que me quedaba, pero lo adictivo que era besarlo me volvió a cegar dejándome en un mundo oscuro donde solo él estaba ahí.