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La hora del almuerzo en el instituto, la hora donde me sentaba con Sean y mis hermanos a hablar tonterías, nada distinto a el desayuno y la cena. Digamos que mi circulo social era mi hermana, su novio y mi hermano gemelo sin olvidar a mi mama.

¡Patético!

–         Creo que no respiran o algo. – Thomas ríe al ver a Sean y Aly comerse o "besarse" frente a nosotros.

–         Es asqueroso.

–         ¡Estamos en la escuela! – Thom los hace separar. – los expulsaran o algo.

–         Ay eres igual con tus conquistas. – Aly rueda los ojos. – en cambio la dulce Lya, ella si puede quejarse.

¡Mi hermano el playboy!

–         Es que nadie quiere besar a Lya, bebe. – Sean me mira con una sonrisa burlona.

–         No me importa lo que digas, Sean. – le muestro cordialmente mi dedo corazón.

–         Deja a mi pobre hermana. – Thomas ríe bebiendo de su refresco. – espera a su príncipe azul.

–         Príncipe de ojos azules. – Aly ríe mirando algo detrás de mí. –Nate Green.

–         ¡Chicos! – la voz del mencionado se hace presente entre nosotros. – ¿Puedo comer con ustedes?

–         No. – Sean niega sonriente.

–         Claro que si. – miro realmente mal a Sean. – El no sabe lo que dice, el se cayo de pequeño de su cuna.

–         Y a ti Thomas te empujo de la cuna y te dejo la cara así. – Sean hace una mueca. – no necesitas mascara para Halloween.

Sean dice babosadas que no logro escuchar ya que Nate me sonríe sentado junto a mí.

Mi atención a lo importante ¡Nate!

–         Te estoy hablando, Lya. –Sean me saca de mi burbuja aventándome un envoltorio.

–         Déjame en paz.

Lo miro unos segundos con una mueca de real fastidio para seguir sonriéndole al chico junto a mi.

–         Lya, te traje esto. –  coloca frente a mí una barra de chocolate con maní.

–         Gracias. – sonrió y tomo la barra.

–         Ella es alérgica al maní, idiota.

–         ¡Sean! – Aly le reprende.

–         ¡Lo siento!

–         No lo sabias, Nate– le tranquilizo.

–         Eres un idiota, Green

–         Ya, Sean– Aly se levanta de la mesa tomándolo por la oreja. – te lo ganaste.

Suelto una carcajada al ver a Aly arrastrar a Sean fuera de la cafetería.

–         Prometo no darte mas maní.

–         Ay que tierno.

–         Estoy tan nervioso. – Nate despeina su cabello. – ¿Quieres ir conmigo al cine o algo así?

No lo demuestro, pero mi yo interno tiene una super fiesta.

–         Claro. – mi voz sale mas aguda de lo normal. – iré contigo al cine o algo.

–         ¡Eso es genial! ¿El sábado?

–         Claro.

Besa suavemente mi mejilla antes de irse casi corriendo.

–         Me sentí invisible o algo asi. – Thomas ríe. – ¡Lya tiene una cita! ¡Pensé que serías monja o algo así!

–         ¡Tengo una cita!

Te odio, Mendes (Shawn Mendes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora