13

6.6K 669 413
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Corrí a todo lo que podía con las llaves del auto de Pierson en mis manos, solo quería molestarlo.

– Lya, por favor. – lo escucha a lo lejos. – mis llaves.

– Las lanzare a la basura, Sean. – Chillo corriendo por los pasillos de la escuela. – basura como tú.

Sean se creyó muy gracioso esta mañana, me hizo correr tres calles para poder subir a su Jeep y cada vez que alcanzaba el auto el simplemente arrancaba.

–Lo siento, pero dame las llaves.

Me doy media vuelta aun corriendo y le muestro cariñosamente mi dedo corazón, pero el mundo esta en mi contra, algún tipo de karma instantáneo. El conserje acababa de trapear el piso por donde corría, termine resbalando y cayendo con todo al suelo.

¡Todo se volvió negro!

– ¡Lya! – Sean me llama una y otra vez.

– Me duele la cabeza.  – murmuro abriendo los ojos. – ¿Dónde estamos?

– Me diste un susto de muerte. – dice besando mi frente.

– Déjame. – lo empujo haciendo una mueca. – me duele la cabeza.

– Fue un fuerte golpe. – puedo escuchar la voz de la enfermera. – creo que debería ir a casa.

Doy media vuelta en la camilla escondiendo mi cara de la luz.

– Sean, llévala a casa.

– Vamos, pequeña mocosa. – me carga el estilo nupcial.

Rápidamente apoyo mi cara de su pecho, el muy idiota huele bien.

– Es tu culpa. – digo por lo bajo.

– Claro, amor. – murmuro sobre mi cabello. – yo soy el culpable de todas tus desgracias.

Siento que nos movemos, pero gracias al dolor no soy capas de abrir si quiera los ojos. Pierson me deja en asiento trasero y yo me recuesto allí.

– Te vas a morir, Lya. – él dice con diversión. – o eso dijo la enfermera.

– Cállate.

El auto se pone en movimiento y el dolor va disminuyendo, pero aun tengo una pequeña molestia. Puedo ver su perfil, mantiene su ceño fruncido mientras maneja.

– Que idiota. – murmuro y este voltea a mirarme sonriente.

– ¿Mejor?

– No, si veo tu fea cara me enfermo más. – le saco la legua.

– Ya te sientes bien. – da vuelta a una esquina. – eso pasa cuando quieres ser mala conmigo.

– Ay cállate.

Te odio, Mendes (Shawn Mendes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora