Inocencia Aislada

20. Mis celos

Oigo mi corazón latir con fuerza, Byron está sobre mí, esperando mi respuesta. Me mira tan fijamente que me pone más nerviosa. No lo comprendo ¿Por qué es así? ¿Por qué tanta insistencia? ¿Para qué quieres saber? Además es muy extraña su actitud, es un tanto cambiante.

—¿Te vas a enojar? —pregunto para asegurarme.

Levanta una ceja intentando entenderme y luego se ríe.

—¿Por qué me iba a enojar?

—Porque me confundo —digo no muy convencida de cómo lo estoy explicando —eres raro, no te entiendo y cuando pregunto, te enfadas, entonces comprendo menos.

—Supongo que no tengo paciencia, perdón por eso —Sigue tocando con su dedo una de las tiritas de mi escote —. Por cierto, estoy esperando ¿Vas a decirme? —Sonríe —Prometo no enfadarme si la respuesta es no, puedo vivir con eso.

Frunzo el ceño.

—¿Por qué Ayla te dice que sí?

—¿Otra vez con ella? ¿Estás celosa acaso? ¿No me quieres compartir?

—¿Celosa? —Lo miro nuevamente confundida —¿Compartir?

—Es cuando no quieres que una persona este con otra y la deseas solo para ti —explica tranquilo y sin dejar de observarme directo a los ojos —. Eso también aplica para no querer compartir.

—Suena egoísta —opino —pero las personas no son objetos —exclamo sin comprender.

—Exacto, pero hay personas que comparten y otras que no. La gente fiel es celosa y problemática, no me van esas cosas ¿Y a ti?

No comprendo, me marea.

—Yo... yo no quiero —Frunzo el ceño otra vez.

—¿Me quieres encerrar en alguna parte para que no me vaya con otra chica? —exclama agarrándose la barbilla pensativo.

—¡No! —me alarmo y se ríe.

—Era un chiste.

—¿Qué clase de chiste es ese? —cuestiono disconforme.

—Adivinaré, solo conoces chistes de niños.

—No soy una niña —Siento mis mejillas arder cuando se acerca a mi rostro —¿Qué... ¿Qué quieres?

—Mi respuesta —dice seriamente —¿Esto te gusta? —Roza mis labios.

—Sí —expreso aturdida, pero él sonríe y acto seguido me da otro beso.