"Yo amo"El mundo, la vida se define en esas dos frases. Porque al fin de cuentas hasta el odio se convierte en un tipo de amor, una obsesión oscura y perversa, que te atrapa sin darte escapatoria. Para mí no existe otro fundamento, ya que es lo único que he conocido en esta efímera vida.
Este mundo no es el de ayer. Antes hubiera creído que yo fui el único que cambié en estos años, pero sé que lo que realmente cambió fue mi querida familia o lo que queda de ella.
-Maximus, cuánto tiempo sin verte- Saludó Ezarel al entrar en la biblioteca. -Si que creciste ¿Cuánto mides ahora?-
-1.70 si no mal recuerdo-
-Vaya, tal vez algún día me alcances-
-No lo creo ¿No estaba en una expedición?-
-Estaba... Sin embargo eran todos feas ratas que no valían la pena dejarlos vivir- Dijo con su típica sonrisa. A decir verdad, él ha cambiado mucho, aunque todos opinen lo contrario.
-¿Encontraste lo que buscabas?- Preguntó y yo sonreí.-No, aún no- Respondí. ¿Qué es lo que realmente busco? ¿A qué estoy respondiendo? ¿Hasta dónde voy a cavar? El señor Ezarel no deja de confundirme. O tal vez solo estoy engañandome de nuevo.
Pasé por los altos pasillos de la realeza. El palacio tiene alrededor de 7 pisos para las distintas clases y labores. Clasificados por algo llamado «Omegaverse». No lo entiendo muy bien, pero pronto debo realizarme el examen para aclarar mi clasificación. En cuanto retome mis estudios, digo retomar porque estoy de vacaciones, separaran las clases en tres (Alpha, Beta y Omega), todo porque creen que los Alpha son superiores a las otras clasificaciones. Aún no me trago la historia de que la reina aceptará todo esto. Dicen que en el mundo humano hacen lo mismo, que es incluso más discriminatorio.
-¡Comandante!- Saludó un soldado.
-¿Qué sucedió?-
-Es sobre las afueras del reino- Se cercioró de que nadie este escuchando -La aldeas del Oeste tienen problemas con los intercambios comerciales... Dicen que están asaltando en los caminos y creen que no son hadas los que los atacan- Susurró cerca de mi oído.
-Gracias por avisarme cabo-
-¡A la orden!-
Me dirigí a mi habitación. Desde aquel incidente, si es que puedo llamarle así, la reina decidió no salir fuera del palacio, al menos que sea para una guerra descontrolada o algo por el estilo. Han pasado 10 años desde entonces, en tres días Erika cumplirá los 18 y aún rezo por su vida. Desde entonces han empezado a aparecer extraños demonios a las afueras del reino. Aún no tengo claridad de como aparecieron, pero inconscientemente busco detenerlos.
Me saqué la armadura, no me gusta andar de plata, sobretodo porque es incómodo. Y la ropa de mi papá me da confianza, finalmente me queda su talla. Me coloqué mi cinturón para guardar mi espada, cuchillas, medicinas y municiones. Me apresure en ir a buscar a mi caballo.
-Khalil, nos vamos a matar bichos- Comenté subiendo sobre mi caballo. Desde que lo domé creció bastante, se convirtió en el caballo más fuerte y alto del reino. Hasta su pelaje castaño oscuro es espléndido.
Nos dirigimos al lugar indicado y esperamos el resto del día a que pasará algo. Comenzaba a anochecer junto a mis bostezos. Entonces escuchamos a una carreta, uno de los señuelos que mandaron. Lo seguí con precaución. En cuanto vi una sombra aproximarse desde los arbustos inmediatamente le lancé una cuchilla. Oí un gritó y una persona cayó en el camino polvoriento.
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"El otro lado del espejo" Volúmen II [CDM Eldarya]
Fanfic[+18] [Mundo Omegaverse] Amaltea es la única solución para los múltiples problemas del Reino de Eel y de toda Eldarya. Tras perder a su hija, la reina se ve envuelta en una maldición, que arrastra a todo el reino. Llevándolo a subsistir en medio del...