"El otro lado del espejo" Volúmen II [CDM Eldarya]

"Séptimo riesgo: Soñar despierto" Capítulo 23

Aún recuerdo la vez que me enamoré de Kentin y la vez que me enamoré de Max. No eran circunstancias parecidas, pero si era por lo mismo. Me enamoré de la sonrisa de ambos. Sin embargo, solo un logró mostrarme la sensibilidad y la fragilidad de estar vivo, y cuando lo supe pensé que era lo más hermoso que me hubieran enseñado.

Los días han estado agitados. Han habido más ataques, en distintas ubicaciones. Poblados bajo el reino han sido incendiados y saqueados, más demonios atacan en las carreteras y asaltan a los mercaderes. El reino estaba conmocionado, nadie descansaba. Y lo peor es que quemaron las cosechas. Las raciones cada día eran más moderadas. Llegaron al punto de que el ejército sombra se comenzó a hacer cargo. Los que dirigían ese grupo eran los hermanos vampiros, quienes se encargaban de formalos con habilidades minuciosamente coordinadas, incluso eran los únicos que llevaban armas de fuego. Ahora se les veían rondando con sus distinguidas ropas negras con bordes y fondos púrpuras.

-Aún no me acostumbro a los ruidos del pasillo- Comentó Kentin.

-Es verdad, yo tampoco... Me cuesta un poco más dormir-

-Pero, no tanto como a ese bobalicon- Señaló a Max con el dedo pulgar. El duendecillo tenía unas tremendas ojeras. -Vaya, soñaste bonito- Dijo sarcástico.

-A diferencia de otros, yo trabajo el doble de noche- Sonrió lascivo y besó rápidamente mi mejilla. -Buenos días Erika, tu desayuno lo dejé sobre el escritorio- Me sonrojé con su tacto tan cariñoso. Kentin lo fulminaba con la mirada.

-Erika, después de comer ¿Qué deseas hacer?- Se coló a atraparme por detrás.

-¿Qué estás haciendo?- Me sorprendió.

-Abrazo a mi novia- contestó e intenté mantener la calma. -Bueno, supongo que está ¡...!-

Me besó y Max vió toda la escena, sin embargo él solo nos ignoró. Siguió su camino.

-¿Qué pasa? Haz estado diferente Erika-