⌜Chico malo⌝ Park Jisung ✔

Capítulo 2

— Para la clase que viene, traigan hecho un mandala y la tarea de hoy, ¿entendido? —Mandó la  profesora guardando sus útiles.

— Sí —Gritan sin ánimos mis compañeros.

Sigo pensando que esta clase es una mierda no solo porque no me gusta ni me llama la atención sino porque no me va a ayudar en nada a lo que voy a estudiar. Y en sí eso era lo que más me molestaba, si era algo cualquiera está bien pero si no apruebo esto NO PASO.

Lo bueno de estar en una clase tan irresponsable como la mía y que a ninguno le guste la materia era que si no hacías la tarea podías tener la oportunidad de volverla hacer ya que absolutamente nadie hace los trabajos.

Y en este caso no fue una excepción ya que nadie hizo el dibujo.

Después haber tenido las de dos horas de arte, ahora nos toca inglés, luego recreo.

La puerta se abre, pensaba que era la profesora pero me sorprendí al ver a uno de los directivos del colegio. Se pone enfrente de toda la clase para que todos podamos verlo y yo lo observo confundida. ¿Qué hace él aquí?

Eran muy pocas las ocasiones en las que un directivo iba a nuestro salón y en esas oportunidades eran para dar noticias importantes.

— Chicos —Da una pausa porque no todos mis compañeros se dieron cuenta de su presencia. Al tener a todos prestándole atención, continua— Les aviso que desde el día lunes, Park Jisung será su nuevo compañero.

¿Qué?

Mis compañeros con la boca en forma de O con los ojos sumamente abiertos era una señal de que había escuchado bien, y que no era la única idiota con esa cara.

Park Jisung estará en esta clase. Mi clase.

Esto es irreal, un universo paralelo. Se alinearon los planetas, porque no entiendo. ¿Quién se le ocurriría cambiarse al curso con peor comportamiento de la escuela? Este chico necesita urgente tener nuevas amistades.

Sin decir otra palabra, se va del aula, dejando a mí y a mis compañeros tanto sorprendidos como confundidos; cosa que es entendible, ¿el temido Park Jisung se cambia de curso? ¿A nuestro curso? Difícil de creer, especialmente por lo de mi curso.

Aún con su, aveces, tierna apariencia podía dar temor por tantos rumores y mentiras dichas por personas sin ninguna clase de vínculo con él. Pero estar con Kwan y Chul le a dado una etiqueta bastante mala para su imagen.

El típico "dime con quien te juntas y te diré quien eres".

A los segundos de que el adulto se haya ido entra la profesora de ingles, esta materia me cuesta, aunque es muy estúpida para algunos, me cuesta, mucho. El año pasado tuve que rendirla en diciembre.

Las clases no son tan aburridas cuando tenés buenas profesoras y divertidos barra muy tontos compañeros, aunque sean unos idiotas y algunas veces los odio a tal punto de querer matarlos. Eran bastante ruidosos cuando les daba la gana.

Así que, como notaran, la clase no fue tan aburrida, con bromas, chistes y malentendidos subidos de tono. No fue tanta tortura. La única fue cuando la profesora empezó a hablar en ingles o tenía que hacer actividades. Para la clase que viene será mejor que rece porque nos haría leer un libro completamente en inglés y eso contaba como nota.

La campana suena nuevamente y mis compañeros junto con la profesora salen del salón de forma apresurada.

Me paro cuando siento que el suelo deja de temblar, literalmente, y me encamino al patio. Detengo mi caminar al recordar que hoy Haneul, Sook, Jejoon y Soosup se iban a sus casas temprano. Ahora, ¿Para que salir? Mejor voy al cuarto de limpieza.

Doy media vuelta para ir al lado contrario al que iba y me pongo los auriculares que colgaban de mi ropa para no escuchar tanto alboroto, pero no puse música, me daba pereza sacar mi celular. Tuve que moverme rápido por la cantidad de alumnos que iban de un lugar a otro.

Al estar frente a la puerta entro rápidamente, esperando que ningún directivo, profesor o incluso un alumno me haya visto. Como siempre esta oscuro y la poca luz que hay es por una muy pequeña ventana que no la tomaba en cuenta ya que ni se notaba. Es lo único que alumbra este lugar, por así decirlo.

Me asusté al notar que una persona estaba en la punta del cuarto, donde yo siempre me siento, o me sentaba. Por poco y pegaba un grito. Alto...

¿Que hace él acá?

— Hola. —Y para sorprenderme más, me saluda. Pero, obviamente, con su característico tono frío.

Ahora no solo hace de menos mi persona porque no, NO ME OLVIDÉ DE ESO TAN FÁCIL, sino que también se roba mi preciado lugar. Si esta era su estrategia para conquistar pues hijo vas por muy mal camino.

— Hola. —le devuelvo el saludo. No seré una maleducada, mi mamá me enseñó modales.

No como él que se dedica a hacerme de menos.

Dios prefería que me den patas a que me haya dicho en mi cara que no valía la pena.

Puedo notar como sus labios se vuelven una sonrisa apenas visible. Me esta sonriendo... No lo creo, ¿tendré problemas de vista? Tal vez sí, necesito mis anteojos.

Voy a la otra esquina y saco mi celular del bolsillo de mi pantalón para reproducir mi música de una buena vez.

Cuando la música se reproduce, cierro los ojos apoyando mi cabeza contra la pared. Tengo sueño y mucho.

La tarea y trabajos realmente me estaban quitando las ganas de vivir, eran demasiados y todos al mismo tiempo. De paso también tenía dos evaluaciones las cuales eran sumamente importantes para mí porque esas materias tenía el riesgo de desaprobar el trimestre y no quería eso, no tengo ganas de desaprobar un trimestre, no otra vez.

Los minutos pasan y mis ganas de dormir aumentan. ¿Para que cierro los ojos sabiendo que tendré mas sueño que antes? Quiero abrir mis ojos pero ellos no quieren. Me dicen "no Danbi, no los abras" y yo no pondré objeción a su pedido.

Lamentablemente de la sorpresa y el susto mis ojos se abren al sentir mi brazo derecho contra otro.

El miedo me inundó al pensar que podía ser algún adulto que me descubrió. Dios no, muy grande podría ser el castigo.

Me saco los auriculares, por si las dudas de que me quiera hablar sea quien sea. Mis ojos de pasan en la persona que esta a mi derecha, Encontrando a Jisung muy cerca de mí, aunque era obvio que era él, ni sé porque me alteré tanto.

— Fuiste muy valiente la otra vez. —Comenta mirando la puerta, su voz era bastante viril, y para agregar por poco y lo decía como un susurro en mi oído por lo que me dio escalofríos.

— Sí —Digo sincera. No se lo iba a negar— ¿Por qué los detuviste?

Esa pregunta me molesto en toda la clase de arte e inglés, me taladraba la cabeza sin parar y me distrajo demasiado, cosa alarmante.

— No te interesa. —Dijo cortante.

— Te cambio la ecuación —insisto—. "No vale la pena" —cito lo que dijo— ¿¡Cómo que no valgo la pena!?

— ¿Querías que te traten como saco de boxeo? —se defiende.

— Me lo pones en duda.

Tuve la intención de insistirle, no quería estar otra clase con la misma pregunta en mi cabeza una y otra vez, pero fui interrumpida por la campana e inmediatamente Jisung se fue sin darme la oportunidad de decirle ni chau.

Suspiro, no quería ir a clases. Estaba demasiado cansada como para mover hasta un dedo. Pero no tuve otra opción que levantantarme e irme a mi salón con la esperanza de que nadie estuviera en el pasillo.