Hey, Max! [VAC#2] ©

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Maximo.

Nada nuevo.

Vemos salir a los médicos y enfermeras de tu habitación y al instante los interrogamos para saber si hay noticias, pero no las hay.

Simplemente niegan con la cabeza y nos repiten lo mismo: que tengamos esperanza.

Pero llega un punto en el que ya no puedes.

Ya no puedo seguir manteniendo las esperanzas, ni confiar en que abrirás tus ojos, ni ilusionarme en que volverás a los pasillos del instituto con tu gran ego y sonrisa seductora.

Simplemente me cansé.

Estoy cansado de repetirles a todos que despertarás, que estarás bien, que cuando menos lo esperemos estarás entre nosotros molestando y preguntando cuánto te extrañamos. Porque ni yo mismo ya me lo creo.

Y si te pones a pensar suena patético que diga que me cansé, cuando ayer mismo estaba diciendo que mis esperanzas habían aumentado porque le apretaste la mano a ella.

Pero creo que simplemente eso fue una equivocación, una maldita equivocación.

Tus padres se encuentran fatal. Ambos han discutido con los médicos más de una vez y sé que ellos no tienen la culpa y hacen lo que pueden, pero que no nos den respuestas simplemente nos pone de muy mal humor y nos angustia demasiado.

Llegué a tal punto que lo único que quiero es verte despertar, hermano. Ya nada me importa más que eso.

No me interesa el instituto, no me interesa las materias, ni el equipo, ni comer, ni dormir; solo me interesa que el timbre del instituto suene para poder llegar al hospital y sentarme en una incómoda silla a esperar.

A esperar que despiertes.

Porque no me moveré de esta silla hasta recibir noticias sobre tí.

Hey!♥️
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—La Torre.