XIV

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La mesa estaba puesta y la comida servida.

En todo el día no he comido nada en lo absoluto, pero siento más repulsión que hambre.

Todo olía realmente bien pero no tenia ninguna seguridad de que aquello estuviera libre de cualquier tipo de droga extraña que él pudiera añadir.

Me observo negarme. Cuando pregunto el porqué, no respondí.

Insistió. Una y otra y otra vez y seguí ignorándole.

Se sentó a mi lado y el mismo cogió la cuchara para alimentarme por su cuenta.

Igual me negué.

Se enfureció. Me llamo malcriada y desagradecida.

Lanzo el plato con la comida al suelo provocando un terrible estruendo.

Comenzó a llorar desconsolado después de gritarme. Note como sus manos comenzaban a temblar y como sus ojos inundados de lágrimas no transmitían nada más que locura.

Antes hubiera odiado la idea de verle así. Antes hubiera buscado la manera de consolarle.

Ahora solo quería huir, porque ese llanto no era real. Era un llanto enfermo de egoísmo.





"Todo será como antes" [SpaMex] 𝙃𝙚𝙩𝙖𝙡𝙞𝙖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora