Protectora de brujas.

Capitulo III.- Empezó el Plan

°Casa de los Salvatore°

Damon había despertado hace unas cuantas horas en medio del frío invierno y la blanca nieve, cerca de las ruinas de la antigua iglesia de Mystic Falls, estaba en el gran salón de la mansión Salvatore tomando un vaso de Bourbon, no era el primero que tomaba y con la botella casi vacía, no dejaba de pensar que era lo que había pasado pero de algo estaba seguro, ella volvió.

Escucho que la puerta principal se abrió dando paso al gélido viento de afuera y al cerrarse Stefan se quedó parado viéndolo sentado frente a la chimenea.

-Te fuiste de la fiesta de navidad, ¿algún problema Damon?-pregunto el castaño sentándose en el sillón que estaba enfrente de su hermano, quien solo lo vio con obviedad.

-Claro que me fui Stefan, ¿que tal el saludo de la brujita?-lo cuestiono indiferente o simulaba solo estarlo, su mente le estaba jugando sucio, no dejaba de sentir que algo había pasado, estaba consciente de que lo hechizaron para olvidarlo, reconoce perfectamente la sensación de perder la memoria, pero lo que lo mataba por dentro, era no recordar qué le dijo a la chica.

-¿Miedo?-le preguntó burlón su hermano recibiendo una mirada de rabia por parte de su hermano mayor.

-¿Porque deberia de tener miedo Stefan?-le devolvió la pregunta molesto dando un largo trago a su Bourbon, sirviéndose más después-Ambos sabemos por qué pasaron las cosas Stefan y si esta aquí para vengarse, no me interesa-sentenció regresando su mirada al fuego de la chimenea.

-Por lo que veo te afecto mucho verla ahí-sorprendido se recargo en el sofá viendo al mayor quien solo apretó sus manos rompiendo el vaso que tenía entre una de ellas, al no conseguir ninguna respuesta del mayor prosiguió-Hay que convencerla, para que nos ayude a sacar a Katherine-propuso recibiendo solo una mirada de confusión-Sigue enamorada de ti, la engañamos, diciendo que sacaremos a Katherine de ahí solo para entregarla a Klaus-siguió contando el plan sorprendiendo a su hermano pero sin dejarlo hablar término-Así tu te quedas con Katherine y Elena conmigo-le dijo sonriéndole un poco a lo que el pelinegro solo rió a carcajadas dejando extrañado a su hermanito menor.

-Vaya Stefan, creí que el villano era yo, piensas como un vampiro al fín hermanito-le dijo el pelinegro sin dudar ni un segundo de las palabras de su hermano, pero algo dentro de él lo detuvo y se quedó parado frente a la chimenea...-La pudieron haber quemado viva-dijo sin despegar sus ojos del fuego hipnotizado-Katherine, quería deshacerse de ella y jamás pude Stefan-confesó llamando completamente la atención del castaño-Estaba bajo las órdenes de Kahterine, pero mi corazón estaba con ella, cuando tu y yo morimos a manos de nuestro padre, fue porque Kahteirne nos traiciono, pero Audrey me lo decía todo el tiempo hermano, todo el tiempo, con magia, con esos tés que tomábamos en el jardín, en sueños, pero yo nunca obedecía sus advertencias-se sentó en el suelo dejando paso a sus sentimientos, solo tapo su rostro enfurecido-Arruine todo como siempre, por mi deseo egoísta de tener a Katherine para mi, cuando siempre supe que solo te amaba a ti, que a mi solo me tenia de juguete, tuve a la mujer perfecta a mi lado y jamas lo vi-se expresó dando paso a unas lagrimas de impotencia.

Stefan solo se acercó a él tocando su hombro y se sentó a su lado viendo la chimenea, recordaba todo, sabía cómo se sentía su hermano, después de morir todos los recuerdos de lo que Kahterine los hizo a hacer los atormentó siempre, como los separo, y como en unos cuantos años los hizo ponerse uno en contra del otro.

-Yo también lo estaba Damon, te entiendo perfectamente y...-no termino ya que su hermano lo sorprendió con una gran carcajada.

-Hay Stefan ¿enserio creiste que me compadecí de ella?-pregunto este viéndolo con burla a lo que el castaño solo rodo los ojos-Claro que la ame, no sabes cuanto-dijo restándole importancia-pero si alguien de los dos iba a morir, ese sería yo-frunciendo el ceño se levantó para irse en dirección a las escaleras. Stefan lo siguió con la mirada aun sin entender el comportamiento de su hermano.