Daddy Issues (Kookmin) Editando

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I know you have daddy issues.

Esperé que Jin y TaeHyung se fueran al otro día para quedarme llorando bajo las sábanas, hace mucho no lo hacía y ahora que lo vuelvo a hacer es reconfortante.
Saber sobre ese hombre me hace mal, cada vez aumenta mi rencor al saber que está bien, prosperando mientras que yo obtuve la peor parte.

No necesité un padre para salir adelante pero fue algo traumático como salí adelante en una edad tan temprana. No quiero creermelas de víctima pero me parece algo tan doloroso el daño que tuve que pasar, los traumas que tengo y que la única persona que estaba conmigo en ese tiempo ahora esté hundiéndose en el fango; yo quiero salvarlo como él lo hizo conmigo.

No me considero débil porque no lo soy, llorar no me hace débil y tan sólo si ustedes supieran por lo que pasé dirían: definitivamente es un chico fuerte. Que mis padre me echara a la mierda como vil basura y que después mi adolescencia la pasara con un chico que me cuidaba cuando podía porque siempre tenía que dejarme solo y era cuando más sufría.

El chico que frecuenta ahora donde trabajo me recuerda a alguien en especial -no de una buena manera-. No a un amor pasado sino a alguien que hace tiempo no recordada; siempre le he tendio envidia.
En fin, ese chico se ve que es alguien que nunca ha sufrido en su vida, es arrogante y odioso, pero hay que aceptar que es de cierta manera adorable.

Ahora hablemos de Jin; un excelente hombre que apareció como un ángel, en el mejor momento de mi vida y de la vida de TaeHyung. No piensen que SeokJin es un chico que todo lo tiene porque no es así. Gracias a la muerte de su padre le han dejado este apartamento donde me albergo yo y antes TaeHyung.
SeokJin nos salvó en un momento justo, nos salvó de la perdición completa; yo me he recuperado casi por completo, pero TaeHyung quiere seguir decayendo, simplemente no lo permitiré.

Los problemas que me invadieron durante mi adolescencia fueron parte mi culpa; no diré que toda porque es mentira. La culpa la tuve yo pero también mis padres por no saberme tolerar, ni ellos mismos lo hacían, nunca toleraron que fuese gay.

Con mis ojos inflamados y cansados camino hasta la cocina para preparar un café con tostadas. Hoy no iré a trabajar así que me resigno a no ver a ese idiota chico y a hacer las compras del mes. Sin embargo no creo que vaya, ayer se veía muy enfermo, ojalá se mejore pronto.
El sonido de la cafetera me hace recapacitar y reprenderme por tener pensamientos tan absurdos. Claro que aquél chico se mejorará rápido, tendrá alguien quien lo cuide.

La notificación de un mensaje se escucha y voy con mi desayuno hasta la sala de estar donde dejo mi desayuno sobre la mesa de centro, tomo mi teléfono y leo el mensaje enviado por TaeHyung.

Ya sé dónde está, arreglate que en veinte minutos voy por ti.

Entonces tomo mi desayuno rápido y me baño para acto seguido colocarme ropa cómoda y partir con mi amigo a penas tocó la puerta.

—Tenemos que tomar un taxi, es algo lejos— detiene uno y le da las indicaciones al conductor.

—¿Lo veremos?— rasco mi ceja derecha en signo de nerviosismo.

—Espero que no— su ceño está fruncido mientras juega con sus manos.

—Luego me acompañas por las compras— le digo y él asiente.

—Llegamos—. Es la zona empresarial de Seúl, como me lo imaginaba. TaeHyung toma con discreción mi mano y me guía un poco más allá. —A esta hora sale el maldito, solo es esperar.

Nos quedamos dentro del taxi a un metro de distancia del lugar; no es un edificio tan grande pero es lo que menos importa. Los nervios aumentan con cada segundo y siento ganas de vomitar, no creo que esté listo para verlo; ni hoy ni nunca.

—JiMin— miro a TaeHyung y éste mira frente mío; miro hacia esa dirección y toda mi cabeza empieza a dar vueltas.