Capítulo 13

988 103 168
                                    


Ojalá nunca te canses de mí

~~~

— Suéltame. — Le dije en un tono amenazante.

Mis ojos ya habían empezado a soltar lágrimas llenas de rabia. Me mantuve de espaldas, negándome a mirarlo.

— No pienso soltarte. He hecho la carrera de mi vida para alcanzarte y no ha sido para que ahora te niegues a hablar conmigo. — No le respondí. Él suspiró. — Rin, lo siento. No era mi intención herirte, solo pretendía abrirte los ojos.

— Que no vea como mi novio folla con alguien no significa que no lo sepa, ¿vale? — Dije con un hilo de voz. Decirlo dolía más de lo que pensaba.

Su mano se aferró con más fuerza a la mía.

— Entonces soy incapaz de entenderlo. Si ya sabes lo que él hace a tus espaldas, si eres plenamente consciente de ello, ¿Por qué sigues con él? ¿Por qué no se lo impides?

Las palabras se atoraron en mi garganta.

— Porqué yo...— ¡NO TENGO OTRA JODIDA OPCIÓN! — lo quiero. Yo lo quiero. — Era incapaz de creerme mis propias palabras.

— Mentira.

— Tú tienes tus razones para no contarme cosas sobre ti. Yo también tengo derecho a tener mis...

— Tengo lupus.

Con esas dos palabras bloqueó mis pensamientos por completo.

— ¿Qué? — No fui capaz de decir otra cosa.

— Tengo lupus. Más específicamente, tengo lupus eritematoso cutáneo, en otras palabras: lupus de piel, es por eso que tengo manchas rojas en el abdomen. Es por eso que repetí de curso. Si no te lo he dicho ha sido porque...— Por su voz, percibí que le costaba decir aquello. — quería evitar justamente esta reacción.

— ¿Por qué?

— Porque...realmente tampoco pensaba que fuera algo que importase demasiado. Esto es solo una enfermedad, sigo siendo yo, no he cambiado. ¿De qué habría servido decírtelo?

No le contesté, no pude contestarle porque no sabía que contestarle. ¿Qué le respondes a alguien que de repente te dice "tengo lupus"?

En el fondo, desde que vi esas manchas, sabía que se trataría de algún tipo de enfermedad pero ¿lupus?

— Rin, mírame. — Las palabras se atoraban en mi garganta. — Es de mala educación darle la espalda a quien te está hablando. — Al acabar de pronunciar esas palabras tiró con delicadeza de mi brazo, haciendo que mi cuerpo se encontrara frente al suyo. — Mis ojos seguían empapados, al igual que mis mejillas; mi rostro era deprimente. Y, aun así, Len alzó su mano y me limpió las lágrimas, paseando sus dedos por mis párpados, mis mejillas e incluso por mis labios, rozándolos levemente. — He de admitir que los ojos llenos de lágrimas me parecen preciosos pero tampoco me apasiona ver a las personas llorar.

— Que frase más ridícula.

— ¿Al fin dices algo y es eso?

— No voy a agradecerte nada. No te creas que en los diez minutos que ha pasado ya lo he olvidado. — Desvié la mirada. — Aún sigo enfadada. No estaba pasando por un buen momento y recibir de repente unas putas fotos de mi novio siéndome infiel no me ayudaron en absoluto.

— Lo siento...no era mi intención herirte.

Fruncí el ceño.

— ¿Y cuál era tu intención?

Hazme sentir viva | RinxLen [EN PROCESO DE EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora