21. Juramento Roto.

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Había pasado casi un mes desde la fiesta de Halloween, hacía una semana que Draco Malfoy había enviado la cantidad de permisos que su hijo le había solicitado para su fiesta, así que todo el mundo estaba extasiado, lo que el rubio había aprendido, es que haría las cosas directamente con los padres de Lily, para evitar que Albus se interpusiera como la primera vez.

—Todo el mundo tiene su invitación, menos yo ¿puedo saber la razón? –lo golpeó Lily en el brazo.

—Fácil, Potts –le sonrió –aprendí la primera vez, que tu hermano puede ser un saboteador, así que envíe la invitación para que tu madre la firmara directamente –la sujetó de la cintura –llámame precavido.

—Y... ¿vas a invitar a Rose? –elevó las cejas, divertida.

—Tengo su invitación, pero dudo que quiera ir, ya sabes, no nos hablamos mucho y...

—Yo me encargo –se la quitó, le guiñó un ojo y se alejó de él.

—No ahora, Potts, por favor –pidió.

—Si no es ahora ¿cuándo, Scops? Aprovecha tus oportunidades para conquistar a la chica de tus sueños.

—Sí pero...

Se controló, quiso decirle que en ese momento, ella era la chica de sus sueños, pero ¿cuánto podría durar ese enamoramiento con Lily? Esperaba que no mucho.

—Te veré después –gritó la pelirroja, aprovechando sus cavilaciones para alejarse corriendo, agitando la invitación en el aire.

—Brillante –bufó enfadado, no quería a Rose en su cumpleaños, porque no quería que Lily se alejara de él, dejándolo solo para que pudiera "coquetear" con Rose a solas y en paz.

Lily se interpuso en el paso de su prima, con una sonrisa brillante en el rostro, así que Rose enarcó una ceja sin comprender aquella actitud de su prima, no había nada que hablar entre ellas.

—Tengo esto para ti –sonrió.

—Ah –soltó sin darle importancia al pergamino después de leerlo.

—Por favor, ya dale una oportunidad.

—Lily, yo –se detuvo, observó un momento a su prima y suspiró, Scorpius no le había dicho que la había rechazado, así que al menos agradecía eso –la enviaré a mi madre, es más fácil que ella la firme.

—Pero irás, no sólo harás que tía la firme ¿cierto? –Sonrió feliz –Hugo y yo estaremos ahí, así que no te acosará mucho, lo prometo, se portará como una persona normal y no como un acosador.

—Sí, claro que iré –sonrió incómoda –agradécele la invitación a Scorpius.

Lily estuvo de un muy buen humor durante sus clases, había logrado que Rose fuese a la fiesta de cumpleaños de su amigo, sin duda era el paso más grande que ese idiota hubiese hecho, y hubiese deseado que fuera él quien le invitara, pero bueno, no se detendría hasta que él consiguiera a la mujer de sus sueños.

— ¡Scops! –chilló al verlo.

—Potts –sonrió inmediatamente al verla.

La pelirroja corrió hasta él, lanzándose a sus brazos, y besándole la mejilla, mientras rodeaba su cuello completamente feliz, así que ese estado de ánimo fue automáticamente colocado en él, nada lo hacía más feliz que ver a su chica, feliz.

—Rose aceptó ir –susurró en su oído, quitando la sonrisa en el rostro de su amigo –dijo que iría, me lo confirmó.

—Genial –fingió una sonrisa.

La Historia Fue || ScorilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora